La Policía fabricó informes falsos por intereses políticos en tiempos del Gobierno del Partido Popular. Así lo sugirió el comisario de Asuntos Internos Marcelino Martín-Blas durante la comisión parlamentaria sobre las cloacas del PP, la Policía Patriótica y la Operación Cataluña. Cuando la diputada Velarde Gómez le preguntó sobre si había lawfare [guerra sucia policial y judicial] en España, el alto cargo policial respondió: “El otro día estuvimos hablando de varios casos, claro. ¿Que se han hecho informes falsos y se han publicado? Sí”.
Martín-Blas respondió a las preguntas sobre posibles filtraciones y revelaciones en la Audiencia Nacional. “Usted afirmó en la pasada comparecencia que había denunciado al juez García-Castellón por revelación de secretos que pudo aportar. ¿En qué estado se encuentra esa denuncia? O si se ha archivado, quiero decir”. A lo que el comisario contestó: “Un momento, aquí hay que puntualizar una cosa. Yo no he denunciado al juez García-Castellón. Yo he denunciado un hecho manifiestamente delictivo. Y hasta hoy no he tenido respuesta. Entonces, lo que le puedo decir es que, antes de que pasaran los cinco años sin respuesta para evitar la prescripción, lo denuncié en Plaza de Castilla, y ahí está la cosa cociéndose”. El policía de Asuntos Internos insistió en ese punto: “Pero, que quede claro, yo no he denunciado al señor García-Castellón; he denunciado un hecho delictivo. Es que no es lo mismo, porque, si no, habría sido una querella directa contra el señor García-Castellón, cosa que no ha ocurrido”. La diputada Velarde afirmó entonces: “Le entiendo perfectamente”.
En la comparecencia, se trató sobre las filtraciones relacionadas con el caso del clan Pujol, procesado por corrupción. El comisario detalló una en concreto: “El periodista (...) publica lo del asunto del pantallazo de los Pujol. Entonces, como consecuencia de esa publicación del pantallazo de los Pujol, me denuncian –con el tiempo, no inmediatamente– por haber filtrado ese pantallazo. Quiero hacer una salvedad: no es lo mismo lo que sabía en el 2012 que en el 2014, que en el 2016 o que hoy, que es diferente. Ya le he dado la referencia de las agendas. Entonces, ocurre lo siguiente. Cuando me denuncian los Pujol por haber hecho la filtración, como la publicación la ha hecho (...) hablo con (...) y le digo: Oye, ¿yo te he dado a ti esta información? Y me dice: No. Digo: Pues, mira, me han denunciado; haz una declaración en sede notarial, que la voy a mandar al juzgado. Tengo aquí la copia del acta notarial, se la voy a entregar ahora. Y efectivamente la mandamos a Andorra, y hasta hoy”. Además, aseguró que puede documentar las supuestas filtraciones desde dentro del Cuerpo Nacional de Policía al Gobierno de Rajoy a través de la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior.
“Usted, en otras ocasiones, negó en esta misma Cámara que existiese la policía patriótica, como se ha llamado de manera popular. Dijo usted que era una terminología inventada por la prensa, como si no hubiese a estas alturas suficientes evidencias del papel político que desempeñó durante varios años la policía adscrita al Ministerio del Interior del Partido Popular. Usted, ahora, después del tiempo y de lo que conocemos, ¿lo sigue creyendo, sigue afirmando eso?”, inquirió la diputada en la comisión parlamentaria de investigación. A lo que Martín-Blas respondió: “En el 2013 es cuando, a raíz del informe borrador, empecé a mosquearme un poco, pero no sabía tampoco nada. Luego, después, ya en el 2015, empieza a haber declaraciones y empiezan los problemas que voy sufriendo, y ya me voy espabilando y voy viendo lo que hay. Y hoy por hoy ya sí puedo decir… O sea, cuando aquí en esta Cámara me preguntaron sobre la Operación Cataluña, yo tenía que decir que no, porque a mí no me había encargado nadie nada sobre la Operación Cataluña. Después, me he dado cuenta de que eso se llamaba Proyecto Barna y que, efectivamente, sí había una operación Cataluña o Proyecto Barna que ahora está documentada. Por lo tanto, no es que mintiera yo entonces, es que no lo sabía. No me puedo inventar las cosas. Es como cuando fui al Parlament de Catalunya y dije que no existía la Operación Cataluña, y lo dije porque yo no lo sabía”.
Además, añadió: “¿Por qué fui cesado? Me parece que, el otro día, en la documentación que entregué… Si se la leo vamos a tardar mucho. Le puedo leer todas las grabaciones, le puedo leer desde cuándo y por qué estoy cesado. Mire, desde agosto del 2012, cuando trato de iniciar la investigación sobre la Gürtel, ya se recoge en las agendas que es un problema, que hay problemas con eso. El propio Pino [Eugenio Pino, director adjunto operativo de la Policía (DAO)] lo testifica en Tándem y dice que se lía tremenda. Después viene lo de Operación Emperador y, según él, es la hecatombe. Es decir, problemas tremendos. Yo estoy causando problemas tremendos. Después, hago el informe sobre el informe borrador y digo algo, pero estaban esperando que dijera otra cosa. Pero a mí nadie me dice lo que tengo que hacer. Eso es verdad, ¿eh?”. El comisario se defendió de las acusaciones del entorno del Gobierno de Rajoy. “Nadie me ha dicho lo que tengo que hacer y, si lo hubieran dicho, no hubiera servido de nada. Tampoco les parece bien. Después, viene la investigación de Nicolás [caso Pequeño Nicolás]. Y, claro, en la investigación de Nicolás lo que aparece es que en la documentación que se interviene en el registro ordenado por el juez a Nicolás son anotaciones referentes a Villarejo y aparece en una grabación con Javier de la Rosa. Y todo eso, como viene en un registro, se adjunta al procedimiento, a la investigación. Entonces, mucho tiempo después, en la grabación del 17 de diciembre de 2014 está explicado ya que me quieren cesar. Ya lo están diciendo. Aquí (señalando su documentación) están todos los pasos que van dando para mi cese, que empiezan en febrero de 2014. Si quiere se lo leo”.
Es entonces cuando comienza la operación de acoso contra el comisario. “Y, luego, para cesarme, lo que hacen es un chantaje, porque, según las grabaciones, según lo que dice aquí, que no es que yo lo supiera, el ministro no era partidario de cesar a nadie; ahora bien, le chantajean, le amenazan con publicar esto y publicar lo otro, hasta que… Bueno, ya está en las grabaciones. Y Marcelino a tomar por culo. O sea, han chantajeado a las autoridades del Ministerio del Interior para conseguir mi cese. En lo que a mí respecta, lo que está claro es que alguien hace unas actividades, y, como es muy cómodo echarle la culpa a otro, me la echan a mí. Puedo continuar tres o cuatro horas dándole explicaciones sobre esta maniobra, porque me afecta a mí directamente y, como me afecta directamente, lo tengo todo apuntado y documentado…”
“Lo que usted quiere decir es que el secretario de Estado, al que extorsionan o chantajean, al final, llega a hacer lo que se le pide por…”, añade la diputada. “Creo que el cese debía contar con el consentimiento del ministro”, sugiere el comisario. “Vale. Es que como le preguntaba antes justamente sobre el ministro y también sobre el secretario de Estado, si sabían, si estaban al tanto o si, directamente, mandaban las órdenes a la policía, a la policía política del Gobierno de Mariano Rajoy, y usted mismo está reconociendo ahora mismo, aunque antes decía que no lo sabía, que ha habido una extorsión y que, políticamente, se ha actuado directamente, por parte del ministerio, por parte del Gobierno, por parte del secretario de Estado, y se ha entrado en la extorsión o en el chantaje, y estaba involucrado directamente, por tanto, en toda esta trama…”, vuelve a la carga la diputada. En ese punto, el comisario matiza: “Mire, la razón por la que yo he traído tanta documentación y por la que vuelvo a traer más hoy es la siguiente. Yo no quiero opinar. Opinen ustedes y procedan en consecuencia, porque ese es su deber. El mío lo he cumplido sobradamente y lo sigo cumpliendo. ¿Entiende? O sea, no me pregunte usted: ¿Usted cree…? No, yo no creo nada, yo traigo documentación para poner los hechos de manifiesto y ustedes son los que tienen que actuar”.