El juez Juan Carlos Peinado se aparta del caso Air Europa, tal como le exige la Audiencia Provincial de Madrid, pero valora plantear un conflicto de competencia para derivar una querella de Vox contra Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno. Peinado no puede investigar este asunto por decisión del tribunal superior.
En una providencia, el instructor consulta con la Fiscalía y recuerda que el juzgado de instrucción número 41 de Madrid “no puede conocer de hechos relativos al rescate recibido por Globalia y Air Europa, según lo dispuesto por la Audiencia Provincial de Madrid”. De esta manera, Peinado acata la autoridad del tribunal de segunda instancia, con el que ha mantenido un duro pulso en los últimos meses.
La Audiencia madrileña ha instado al magistrado en varias ocasiones a acotar la causa, la última el pasado mes de mayo, cuando reiteró que no podía seguir investigando las ayudas a Air Europa “al quedar fuera del objeto de investigación [del caso máster] ya delimitado al inicio de la instrucción”.
Asimismo, revocó la imputación del rector de la Universidad Complutense, Joaquín Goyache, y la del exconsejero del PP de Madrid y actual directivo de Instituto de Empresa, Juan José Güemes, al considerar que carecía de fundamento.
Así las cosas, Peinado ha pedido a la Fiscalía que le presente un informe sobre la competencia de su juzgado para estudiar la querella de Vox o “la posibilidad de plantear una cuestión de competencia”.
El juez instructor ya canceló en mayo el informe que había encargado previamente a la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil sobre dicho rescate público de la aerolínea, acordado en 2020 por el Gobierno.
Antes de estas decisiones judiciales, Vox, que ejerce como acusación popular, presentó una querella contra Begoña Gómez, el exasesor ministerial Koldo García, el presunto comisionista Víctor de Aldama y el exconsejero delegado de Globalia Air Europa Javier Hidalgo por supuestos delitos de tráfico de influencias, prevaricación y cohecho.
Mientras, Peinado investiga a la esposa de Pedro Sánchez por presuntos delitos de tráfico de influencias, corrupción en los negocios, apropiación indebida de marca e intrusismo.
En concreto, se investiga el presunto tráfico de influencias de Gómez a favor de Barrabés; la gestión en la cátedra y los dos másteres que codirigía la mujer de Sánchez en la Complutense; la presunta apropiación indebida del software de dicha cátedra; y el nombramiento de Cristina Álvarez como asesora de Gómez.
Además de la propia Begoña Gómez, en la causa permanecen investigados su asesora, Cristina Álvarez; el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín Aguirre; y el empresario Juan Carlos Barrabés.
Más testigos
Por otra parte, Marc Murtra, expresidente de Indra, explicó al magistrado Juan Carlos Peinado que “nunca recibió” una “insinuación por parte del presidente” Pedro Sánchez, “ni de nadie”, sobre la “conveniencia” de que la compañía tecnológica se sumara a un proyecto de colaboración con la cátedra que Begoña Gómez, esposa del jefe del Ejecutivo, impulsaba en la Universidad Complutense de Madrid (UCM).