El verano vuelve a teñirse de llamas y de polémica política. En medio de una temporada marcada por incendios forestales de gran magnitud en varias comunidades autónomas, Podemos ha alzado la voz contra el PSOE, al que acusa de “bloquear” una verdadera política frente a los incendios, como, por ejemplo, la aprobación de la ley de bomberos, la precariedad con la que trabaja este colectivo.
El reproche de Podemos
Según la formación morada, la falta de avances legislativos y judiciales en materia de prevención y persecución de delitos relacionados con incendios refleja una inacción institucional que perpetúa la impunidad. Portavoces del partido han recordado que existen propuestas concretas sobre la mesa para reforzar el Código Penal en relación con la negligencia y la intencionalidad en la provocación de fuegos, pero que el PSOE no ha querido darles curso parlamentario.
Podemos sostiene que el abordaje de los incendios debe ir más allá de la gestión medioambiental o de protección civil, y convertirse en un eje de la política del Estado, con medios suficientes para investigar y sancionar tanto la mano negligente como la dolosa.
El trasfondo político
El reproche se produce en un momento de tensión política. La gestión de emergencias como los incendios forestales suele estar descentralizada en comunidades y ayuntamientos, pero Podemos insiste en que es el Ejecutivo central quien debe impulsar un marco normativo sólido para castigar a los responsables y, sobre todo, disuadir futuros delitos ambientales.
Para los morados, la negativa socialista a endurecer el marco legal responde a un cálculo político que prioriza la estabilidad de la coalición y evita abrir un nuevo frente legislativo. El PSOE, por su parte, ha defendido que ya existen mecanismos suficientes en el Código Penal y que la clave no está en endurecer las penas, sino en mejorar la prevención, la coordinación y los recursos materiales.
PP, una política criminal
La secretaria general de Podemos, Ione Belarra, ha acusado al Partido Popular de haber desmantelado los servicios públicos mediante privatizaciones y recortes. Según la dirigente morada, en las comunidades autónomas donde gobierna el PP "han recortado mil plazas de brigadistas y agentes forestales sólo en los dos últimos años. Es la misma gestión homicida de Ayuso con las residencias y de Mazón con la dana".
Sin embargo, según Belarra, el problema está en que frente a sea política criminal hay un Gobierno central que no está "a lo que tiene que estar, no hace nada y no protege los servicios públicos como debería"
Más allá de la disputa
La discusión refleja una grieta de fondo en la política española: la tensión entre el enfoque punitivo y el enfoque preventivo en la lucha contra los incendios. Mientras Podemos exige medidas ejemplarizantes en el ámbito penal, el PSOE apuesta por una visión más técnica y de gestión de riesgos.
En el terreno, la realidad se impone con crudeza: cada verano, miles de hectáreas arden y cientos de familias sufren pérdidas. El debate parlamentario aún no ha cristalizado en una estrategia común, y la brecha política amenaza con retrasar cualquier avance significativo.
El pulso que viene
Podemos ha advertido que seguirá presionando para que se debata una reforma penal específica y acusa al PSOE de dejar desprotegidos tanto a los ecosistemas como a la ciudadanía que convive con la amenaza del fuego. La batalla legislativa por el enfoque de la política criminal frente a los incendios, más allá de su tecnicismo jurídico, se perfila como un nuevo campo de disputa en la ya compleja relación entre los socios de Gobierno.