La amenaza de abuso sexual infantil tanto en línea como fuera de línea, en la UE, crece año tras año y afectó a 1,5 millones de niños sólo en 2022. Si bien se han logrado avances para proteger mejor a los niños en línea, las normas penales existentes sobre abuso y explotación sexual infantil ya no son adecuadas para su propósito. Es por eso que la Comisión ha propuesto ahora actualizar estas leyes para cambiar una realidad en la que uno de cada cinco niños sufre alguna forma de violencia sexual.
En primer lugar, la UE ampliará la definición en todos los Estados miembros de lo que se considera un delito penal cuando se trata de abuso sexual infantil, para abarcar delitos como la transmisión en vivo de abuso sexual infantil. En lo que respecta a la lucha contra los delitos, se reforzarán la persecución y el apoyo. Esto dará a las víctimas un plazo más largo para denunciar los abusos sexuales, les otorgará derechos a una compensación financiera y brindará más apoyo tanto a los niños víctimas como a los adultos sobrevivientes.
También se reforzará la prevención. Los Estados miembros deberían hacer un mejor uso de los programas de prevención disponibles e invertir más para crear conciencia, especialmente sobre los riesgos en línea. Además, los reclutadores para actividades que impliquen un contacto cercano con niños y para organizaciones que trabajan contra el abuso sexual infantil deben estar obligados a verificar los antecedentes penales de los candidatos.
Estrategia integral contra el abuso sexual infantil
La estrategia de la UE para el período 2020-2025 establece una respuesta integral a la creciente amenaza del abuso sexual infantil tanto en línea como fuera de línea, mejorando la prevención, la investigación y la asistencia a las víctimas. Incluye ocho iniciativas para establecer un marco legal sólido para la protección de los niños y facilitar un enfoque coordinado entre los numerosos actores involucrados en la protección y el apoyo a los menores.
Las iniciativas tienen como objetivo respaldar la plena aplicación de las normas actuales (en particular, la Directiva 2011/93/UE sobre la lucha contra el abuso sexual y la explotación de niños); garantizar la legislación de la UE permita una respuesta eficaz; identificar lagunas legislativas, mejores prácticas y acciones prioritarias; reforzar los esfuerzos de aplicación de la ley a nivel nacional y de la UE; permitir a los países de la UE proteger mejor a los niños mediante la prevención; crear un centro europeo para prevenir y combatir el abuso sexual infantil; impulsar los esfuerzos de la industria para garantizar la protección de los niños en sus productos, y mejorar la protección de los niños a nivel mundial a través de la cooperación entre múltiples partes interesadas.