Las 36 semanas que han transcurrido de 2024, un total de 354.240 minutos hasta este 3 de septiembre, arrojan una cifra espeluznante de crímenes machistas en lo que va de año: un terrorista machista asesina a su pareja o ex pareja cada semana en España. Los crímenes machistas acaparan titulares secundarios, esquinados, de cola o relleno o en página par escondidos, pero en contadas ocasiones abren telediarios o primeras páginas de periódicos a no ser que el asesinato machista haya sido múltiple o incluya también el crimen del algún hijo o familiar de la pareja o ex pareja. Otro dato revelador es que casi dos tercios de los feminicidios de lo que va de 2024 se han producido en verano.
Con el último crimen machista de Lorena en Castellón, que tenía 47 años, era madre de dos hijos y ya había sido víctima de otro maltratador que se encuentra en prisión actualmente, son ya 34 las mujeres asesinadas por violencia machista este año, una realidad inapelable que aún no ha concienciado lo suficiente a la sociedad española, en plena ola de negacionismo de la extrema derecha y de políticas blanqueadoras de esta cruel realidad estructural.
Consternada ante otro posible caso de violencia de género sobre el que la @DelGobVG está recabando datos.
— Pilar Bernabé /❤️ (@pilarbernabe) September 3, 2024
De confirmarse, sería la sexta mujer asesinada este año en la Comunitat Valenciana.
Más allá de las condenas públicas por parte de los máximos responsables de las políticas de igualdad y de justicia y de minutos de silencio a las puertas de los organismos oficiales –suman en total 34 minutos en 2024, apenas un grano de arena en los 354.240 minutos transcurridos en los 246 días de este año hasta hoy–, las políticas de estado siguen sufriendo numerosos déficits en su correcto funcionamiento para atajar unos crímenes que, año tras año dejan un reguero de muerte y desolación más o menos similar, con decenas de familias destrozadas para siempre.
El asesino de Lorena, que se ha entregado a los Mossos en Barcelona, sumaba condenas por amenazas, malos tratos y quebrantamiento entre agosto de 2021 y marzo de 2022
Sin ir más lejos, la mujer asesinada por su pareja en el domicilio en el que convivían en la capital castellonense dejó de ser protegida por el sistema VioGen en enero del pasado 2023. Apenas un año y medio después, su pareja, que cumplió su última condena por violencia de género un mes después, en febrero del pasado año, la ha asesinado sin que nadie ni ningún sistema oficial la protegiera frente a su agresor, con el que actualmente convivía, según ha informado la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé.
El asesino de Lorena sumaba tres sentencias condenatorias por delitos de amenazas, malos tratos y quebrantamiento, dictadas por un Juzgado de Violencia sobre la Mujer y un Juzgado de lo Penal entre agosto de 2021 y marzo de 2022. La última de las sentencias, por delito de quebrantamiento, se dictó en marzo de 2022 y en ella se le impuso ocho meses de prisión, lo que motivó su ingreso en un centro penitenciario. Esa pena privativa de libertad quedó cumplida en noviembre del mismo año 2022.