Hartos de ser los grandes olvidados de la sociedad española, los representantes del Partido Autónomos están convencidos de que queda mucho trabajo por hacer y logros por conseguir para uno de los colectivos más importantes del país, el que aglutina los intereses de pequeños empresarios y autónomos. Esta nueva formación en liza para este importante año electoral pretende apuntar alto y lograr representación parlamentaria, donde al fin hacer llegar las reclamaciones de unos ciudadanos que se sienten utilizados por la inmensa mayoría de formaciones políticas existentes en la actualidad y otras asociaciones que a priori dicen defender sus intereses. Juan Antonio Aroca, murciano de Monteagudo y residente en Sevilla, gestiona un negocio de sistemas de control para edificios y ahora ha decidido apostar por la defensa del colectivo de trabajadores por cuenta propia a través de Partido Autónomos.
¿Con qué propósitos fundamentales llega el Partido Autónomos al complejo espectro político actual en España?
Partido Autónomos ha nacido con el objetivo de hacer llegar la voz de los trabajadores por cuenta propia a las instituciones. Los emprendedores, los pequeños empresarios y los autoempleados en España no se sienten representados ni defendidos por ningún partido político ni tampoco por infinidad de asociaciones de autónomos que al final viven de subvenciones del Gobierno. Sin embargo, somos los que creamos empleo, los que hacemos país, los que nos la jugamos día a día, poniendo el alma en nuestros negocios.
¿Qué mejoras principales quiere aportar su formación a la ciudadanía española actual?
Hay mucho trabajo que hacer. Un autónomo no tiene horario, ni conciliación familiar, ni facilidad para contratar, por alto coste en impuestos que tiene hoy en día un empleado. Un autónomo no tiene los mismos derechos que los trabajadores por cuenta ajena. No gozan de la misma cobertura si enferman, o si quieren formarse. Sólo se acuerdan de nosotros para pagar impuestos y más impuestos. La presión fiscal en España es insoportable y, sin embargo, no se ve reflejada en los servicios hacia los ciudadanos. Se malgasta dinero público como si no fuera de nadie. En Partido Autónomos creemos que hay que parar esta dinámica de endeudamiento y derroche y fomentar la economía de país; porque a través de la creación de riqueza se logra el bienestar de toda la población.
“Partido Autónomos no defiende sólo a un colectivo, no es de derechas, ni de izquierdas. No tiene color político porque se trata de las personas”
En esta polarización ideológica que actualmente se vive, y se sufre, en el panorama político nacional e internacional, ¿tiene cabida un nuevo partido como Partido Autónomos?
Más que nunca. Porque Partido Autónomos, a pesar del nombre, no defiende sólo a un colectivo, no es de derechas, ni de izquierdas. No tiene color político porque se trata de las personas. Los autónomos tenemos hijos, empleados, padres. Creemos que la política debería solucionar problemas, no crearlos como ocurre actualmente. Y es esta libertad de pensamiento lo que nos hace ver el futuro que queremos sin sesgo ideológico. Siempre decimos que hacen falta más ideas y menos ideologías. El invento de las ideologías lleva 45 años de democracia creando división y enfrentamiento. Hace mucho que Franco murió. Sin embargo, hay jóvenes que ni conocen la historia y hablan de los fachas y de los rojos alegremente.
Ciudadanos ha sido un partido que apostó desde sus inicios por la defensa del colectivo de autónomos. ¿En qué se diferencian vuestras iniciativas de las prometidas en su día por el partido de Inés Arrimadas?
Ciudadanos y todos los demás partidos. En campaña, los autónomos estamos en todos los discursos y mítines. Pero la realidad, pasados los comicios, es que seguimos igual. Para empezar, no somos un partido de centro, como tampoco de cualquier otra ideología, pero la inmensa diferencia entre Ciudadanos (o cualquier otro partido) y Partido Autónomos es que nosotros no somos políticos. Somos como tú, personas que están hartas de las mentiras de nuestros políticos. Lo que ocurre es que nos vemos obligados a jugar a su juego, para poder cambiar las cosas, no por ambición de poder. Por ejemplo, en nuestro partido nadie cobra un euro. Le quitamos tiempo a nuestras familias, tiempo al sueño, para poder llevar a cabo una idea más allá del juego político, que nos cuesta tan caro a los ciudadanos. Pero huimos de vivir de la política.
“La inmensa diferencia entre Ciudadanos (o cualquier otro partido) y Partido Autónomos es que nosotros no somos políticos”
El progresivo desmantelamiento de Ciudadanos elecciones tras elecciones, ¿cree que supone una excelente oportunidad o un serio aviso para iniciativas como Partido Autónomos?
Por suerte o por desgracia, se hace más patente que nunca el refrán de “a río revuelto, ganancia de pescadores”. Están llamando a nuestras puertas políticos de otras formaciones, porque ven en Partido Autónomos esa idea de hacer política con el ciudadano en el centro, sin marcas ideológicas que lastren el tomar decisiones coherentes en un futuro, pensando siempre en mejorar la sociedad día a día, no en agradar a unos o a otros y conseguir adeptos.
¿En qué situación llega el colectivo de autónomos a las elecciones municipales, autonómicas y generales de este 2023?
Hay pesimismo. El colectivo de autónomos es un reflejo de la sociedad. El ambiente es de resignación, desidia frente a los políticos actuales y poca esperanza en que las cosas vayan a cambiar. Hemos pasado una pandemia con negocios cerrados pagando cuotas de autónomo, alquileres y seguros sociales, a pesar de no poder tener actividad. Mientras, la clase política se subía un 3% el sueldo. Hay enfado y esto se traduce en más polarización del voto. Por eso es tan importante que la gente conozca Partido Autónomos, porque es una luz al final del túnel. Se puede cambiar, poco a poco, pero es posible hacer política de verdad, para mejorar la vida de todos los ciudadanos, no sólo de los autónomos.
¿Cuáles son sus necesidades más urgentes?
Es necesario cambiar el panorama impositivo, el modelo económico que sufrimos y que se está agravando, nos va a llevar a depender de ayudas para no quebrar y estas ayudas al final se tienen que devolver. ¿Y de dónde sale ese dinero? De más subidas de impuestos. Invertir más en investigación, en sanidad y en educación, porque eso creará mejores profesionales, disminuirá el paro juvenil, que es altísimo. De esta forma se moverá la economía, porque al final lo que todos necesitamos es poder trabajar y ganar lo suficiente para progresar: comprar una vivienda, ir de vacaciones, tener hijos, etc.
El programa político de un partido como el vuestro va dirigido prioritariamente sin duda hacia la economía, pero ¿qué políticas sociales plantean acometer en caso de lograr alguna representación parlamentaria ya sea en ayuntamientos, administración autonómica o Parlamento nacional?
Es que todo pasa por la economía. Nunca hay que olvidar que lo público se paga con lo privado. El equilibrio entre subir impuestos y no asfixiar la economía es la clave. Un ejemplo: si se fomenta la contratación, bajando los seguros sociales, hay más trabajadores que cotizan, más personas con poder adquisitivo que consumen, por tanto, negocios con más clientes, ergo se recaudan más impuestos. Las políticas sociales son necesarias para asegurar que no haya exclusión, pero una ayuda por sí sola no se puede eternizar, porque hace dependiente al que la percibe. Hay que dar salida profesional al tiempo que se ayuda a las personas. Darles un propósito, una salida para que sean independientes. Eso repercute en su dignidad. A todos nos gusta sentir que somos capaces de valernos por nosotros mismos. Por eso la formación es muy importante.
“Sólo se acuerdan de los autónomos para pagar impuestos y más impuestos”
La inmensa mayoría de las empresas de este país son pymes. ¿Considera que están bien defendidas actualmente sus necesidades por los diferentes partidos con representación parlamentaria?
En ningún caso. El tejido empresarial en España está compuesto en un 99,8% de pymes, somos los que tiramos del carro. Las grandes empresas, que sí pueden hacer presión al Gobierno, en cualquier momento se deslocalizan y dejan un buen número de parados, salen en las noticias un tiempo y luego desaparecen. Los autónomos y pymes pagamos más impuestos que las grandes empresas, cotizamos en España, no nos movemos de aquí y ponemos toda la carne en el asador, porque vivimos directamente de nuestro esfuerzo. Cuidamos a nuestros empleados, que en muchos casos son familia. Pero todo ese compromiso con el país no se ve recompensado, al contrario, cada vez nos machacan más a impuestos y exigencias burocráticas.
¿Qué estructura de partido tiene actualmente Partido Autónomos para afrontar un año electoral tan ambicioso y completo como este 2023?
Esto es una carrera de fondo y aún somos un partido pequeño, aunque crecemos rápido. Tenemos representación en toda España. Pero dependemos de nosotros mismos, no tenemos donaciones multimillonarias, por lo que nos financiamos con nuestros afiliados. Por eso somos conscientes de que no podemos abarcar aún demasiado. Es ahora cuando la gente empieza a conocernos, pero recibimos una respuesta positivísima que nos anima a seguir en nuestra lucha diaria. Son y serán las personas especiales que vamos encontrando, las que, en determinados municipios, pueden marcar la diferencia y empezar a hacer cambios desde abajo, desde cada Ayuntamiento de cualquiera de los maravillosos pueblos que tenemos. Por poner otro ejemplo: en las autonómicas sólo pudimos superar la burocracia exigida para presentarnos en las listas de tres provincias, Cádiz, Málaga y Sevilla. Conseguimos un buen número de votos y también darnos bastante a conocer, pero no teníamos derecho a minutos en los medios, porque la ley electoral dice que había que presentarse en las ocho provincias. Por cierto, esta es otra ley a cambiar, la electoral, que está diseñada para perpetuar a los partidos grandes y constituye una barrera de entrada a partidos como el nuestro, además de ser injusta con respecto al reparto de escaños por comunidades.