En un estudio revolucionario publicado en la revista 'Proceedings of the National Academy of Sciences', los investigadores han presentado evidencias que sugieren que el polvo del Sáhara podría tener un papel crucial en la lucha contra el calentamiento global. El trabajo se centra en analizar los efectos de las nubes de polvo sahariano en el metano atmosférico y ha revelado conclusiones que podrían tener implicaciones de gran alcance para comprender el balance mundial de metano y las razones del preocupante aumento acelerado de este gas en la atmósfera.
El mecanismo propuesto por el estudio indica que el polvo mineral del Sáhara se mezcla con el aerosol marino, dando lugar a aerosoles de polvo mineral y aerosol marino (MDSA). Sorprendentemente, estos aerosoles resultan ser una fuente clave de cloro atmosférico en el Atlántico Norte, que a su vez, juega un papel esencial en la oxidación del metano y el ozono troposférico mediante un proceso llamado fotocatálisis.
Los investigadores, liderados por Maarten van Herpen de Acacia Impact Innovation, utilizaron un modelo químico-climático tridimensional global (CAM-Chem) y observaciones de laboratorio y campo, incluyendo muestras de aire de Barbados, para respaldar sus hallazgos. Durante más de dos décadas, los científicos se habían desconcertado por una disminución estacional del isótopo estable 13CO en el aire de Barbados. Sin embargo, al incorporar al modelo el aumento de cloro proveniente del mecanismo MDSA, los resultados coincidieron perfectamente con los datos observados y se explicó finalmente el agotamiento del 13CO.
El metano es un gas de efecto invernadero extremadamente potente, con un impacto en el calentamiento global mucho mayor que el dióxido de carbono. Su concentración atmosférica ha aumentado considerablemente desde la época preindustrial y sigue creciendo a un ritmo alarmante. Las emisiones antropogénicas de metano, provenientes de actividades humanas, son en gran parte responsables de este incremento, pero el estudio sugiere que las emisiones biológicas de metano, como las provenientes de humedales y la agricultura, también podrían estar contribuyendo más de lo estimado anteriormente.
El descubrimiento del efecto del MDSA en la oxidación del metano ha despertado la esperanza de que este proceso natural pueda ayudar a contrarrestar las emisiones de metano y contribuir a frenar el calentamiento global. Sin embargo, aún queda mucho por investigar y entender sobre cómo funciona este mecanismo en otras partes del mundo. Investigaciones adicionales y la recopilación de más datos serán necesarios para obtener una imagen completa y precisa de la influencia del polvo del Sáhara en el equilibrio del metano y el cambio climático global.