La Fiscalía ha pedido al juez Peinado que abra una investigación a una de las acusaciones populares por revelación de secretos en el caso de Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. El Ministerio Público rechaza que se abra la investigación contra el magistrado instructor y el director de comunicación del TSJ de Madrid, pero considera que hay indicios contra el abogado Aitor Guisasola, personado en la causa, tal como informa la Cadena Ser.
La Fiscalía ha rechazado abrir causa por un presunto delito de revelación de secretos contra juez Peinado y el director de comunicación del Tribunal de Justicia de Madrid, Luis Salas, por la filtración del sumario del caso que investiga la actividad profesional de Begoña Gómez. El escrito del fiscal sí que sostiene que hay “indicios bastantes” de que el abogado Aitor Guisasola, de la acusación popular Movimiento por la Regeneración Democrática de España, personado en el sumario contra Begoña Gómez, filtró el contenido del sumario en redes sociales una vez levantado el secreto de sumario. El escrito sostiene que levantar el secreto no exime del “deber de reserva” que el letrado incumplió flagrantemente. Por eso, insta al juez Juan Carlos Peinado a que deduzca testimonio contra él y envíe la causa al decanato de Madrid para que se inicie una investigación.
El Ministerio Público reprocha al denunciante e impulsor de la querella contra Peinado, el periodista de izquierdas Máximo Pradera, que se “limite a aportar meras noticias que aparecen en los medios de comunicación” cuando la jurisprudencia del Tribunal Supremo impone “la prohibición de investigaciones prospectivas y las cautelas cuando la fuente de prueba son informaciones periodísticas”. Cabe recordar que fue el propio Peinado quien admitió a trámite la querella del sindicato ultraderechista Manos Limpias contra la primera dama basándose en su mayoría en recortes de prensa, algunos de los cuales no eran más que bulos.
Máximo Pradera es un periodista que se ha destacado como látigo de la derecha española. En mayo de 2014, y después de una discusión en antena con su compañero de sección, Antonio Naranjo, este último denunció por Twitter una agresión tras la emisión del espacio, lo que llevó al programa a terminar su colaboración con los dos invitados. El 11 de julio de 2014, Pradera anunció en una nota de prensa su intención de demandar a su antagonista en las tertulias por intromisión en su honor.
La audiencia previa fue en octubre de 2015. Pradera fue inicialmente condenado en costas por el Juzgado de Primera Instancia número 1 de Pozuelo de Alarcón. En julio de 2017, la Audiencia Provincial de Madrid revocó la sentencia de instancia y dejó establecido que no hubo agresión física ni actitud violenta por parte de Pradera, sino una fuerte discusión entre ambos, y estimó especialmente el testimonio prestado por Julia Otero, según la cual nunca existió el acoso relatado por Naranjo sino una “discrepancia verbal” entre ambos colaboradores de su programa. La Audiencia condenó a Naranjo a indemnizar a Pradera con 5.000 euros en concepto de daños morales y a pagar de su propio bolsillo la publicación del fallo judicial en Periodista Digital o una web similar y en su cuenta de Twitter, rectificando la sentencia inicial de 2016 que daba la razón a Naranjo.
El 26 de abril de 2020 Pradera generó polémica con sus críticas a Isabel Díaz Ayuso al expresar que tiene “lágrimas de cocodrilo”. Posteriormente se explicó en un artículo en el periódico Público, escribiendo sobre estas lágrimas: “Suelo conmoverme cuando alguien llora en público. Me río de lo que Ayuso hace con ellas antes y después de que le hayan brotado. Antes de salir para La Almudena, elige a conciencia un rímel barato, de los que se corren enseguida”. El 25 de febrero de 2021 publicó un artículo en el diario Público lamentando el cáncer de su compañera Julia Otero y deseando que en su lugar lo sufriesen Donald Trump, José María Aznar o Macarena Olona. Público presentó sus disculpas a los mencionados al día siguiente y prescindió de Máximo Pradera por este hecho. En 2021, Máximo Pradera pidió “cortarle el cuello a Ayuso con una macheta de carnicero”, según publica La Razón. El periodista lo escribió en un tuit tras conocerse que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid avalaba la convocatoria de elecciones. El PP denunció el “miserable” tuit del periodista incitando a “acabar con la vida” de Ayuso.
Ahora, el escrito del fiscal emplea los mismos argumentos que ha puesto por escrito “para defender la actuación del fiscal General del Estado, Álvaro García Ortiz, que dio la orden de informar y atajar los bulos que se publicaron en el caso en el que se investiga por presunto fraude fiscal a la pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso”, informa la Ser. Sobre la acusación al juez, Juan Carlos Peinado, la resolución recuerda que no hay “prueba alguna” de que filtrara la investigación y sobre el periodista Luis Salas añade que el Protocolo de Comunicación de la Justicia del Consejo del Poder Judicial consagra que “el principio de publicidad de la Justicia es una garantía esencial del funcionamiento del Poder Judicial”.