La eurodiputada de Podemos y exministra de Igualdad, Irene Montero, defendió su candidatura para presidir el Parlamento Europeo con un apasionado discurso que denuncia los recortes de derechos promovidos por la extrema derecha en Europa y critica la complicidad de la derecha tradicional. Montero compitió por la presidencia de la Eurocámara contra Roberta Metsola, quien finalmente fue reelegida por 562 votos favorables, gracias al apoyo de populares, socialistas y liberales. Metsola, quien ocupará el cargo la mitad de la legislatura, ha sido criticada por Montero por su falta de referencia explícita a la situación en Gaza en su discurso de reelección.
La contienda por la presidencia del Parlamento Europeo
Montero, en su intervención, acusó a las fuerzas conservadoras de Europa de llevar a la región hacia la guerra, mientras protegen al "genocida Netanyahu". Según Montero, Netanyahu no podría llevar a cabo sus acciones sin el apoyo de Estados Unidos y Europa. "Europa no puede seguir siendo cómplice del Estado genocida de Israel", afirmó, instando a romper el acuerdo de asociación con Israel y a imponer sanciones contra Netanyahu similares a las impuestas a Putin.
Roberta Metsola, la eurodiputada maltesa del Partido Popular Europeo (PPE), fue reelegida gracias a un acuerdo entre populares, socialistas y liberales. Su discurso de reelección se centró en la "humanidad en Oriente Próximo" y la soberanía parlamentaria, evitando menciones directas a la situación en Gaza y las muertes de palestinos causadas por la ofensiva israelí. Esta postura ha sido duramente criticada por Montero, quien considera que la falta de acción y condena explícita por parte de Europa es una hipocresía insostenible.
Denuncia del genocidio en Palestina
Montero usó su tiempo ante la Eurocámara para reivindicar la paz y los derechos humanos, y para señalar las complicidades que ve en el panorama político actual. "Nos están llevando irresponsablemente a la guerra mientras se protege a un genocida", declaró, destacando la necesidad urgente de acabar con el genocidio y la ocupación ilegal de Palestina.ocupación ilegal de Palestina.
La eurodiputada también se dirigió a las familias políticas que apoyan a Metsola: populares, socialistas y liberales. "Ustedes dicen defender un cordón sanitario a la extrema derecha. Las elecciones en Francia nos dejan una lección democrática y antifascista: a la extrema derecha se le gana por la izquierda", afirmó. Montero criticó las políticas neoliberales y el relato de la moderación, argumentando que estas estrategias no frenan a la extrema derecha sino que, de hecho, le ponen una alfombra roja.
La visión de la izquierda
Montero concluyó su discurso subrayando los valores y principios del grupo de La Izquierda, del que forma parte. "Desde el grupo de La Izquierda europea creemos que es el momento de comprometerse políticamente para hacer crecer las fuerzas de la paz, del fin del genocidio, del derecho a la vivienda, de los servicios públicos, de los derechos laborales, del feminismo, del antirracismo, del antifascismo y de la justicia social", dijo.
El grupo de La Izquierda, que incluye a Podemos, parte de Sumar, EH Bildu, La Francia Insumisa, Syriza, Die Linke y Sinn Féin, ha presentado históricamente candidatos a la presidencia de la Eurocámara, aunque siempre han sido superados por los acuerdos entre las principales familias políticas. En 2019 y 2021, la candidata fue Sira Rego (IU), y en 2014, Pablo Iglesias.
Montero destacó la necesidad de una Europa de paz y justicia social, criticando el consenso de guerra que, según ella, se está imponiendo a los pueblos de Europa. Comparó la situación actual con la gran coalición de austeridad impuesta hace 15 años, de cuyas consecuencias aún no nos hemos recuperado.
Críticas a la gestión europea y la defensa de derechos
El discurso de Montero fue interrumpido en varias ocasiones por las bancadas de la derecha, reflejando la polarización y tensión en torno a sus declaraciones. A pesar de esto, Montero mantuvo su postura firme, abogando por una política que priorice los derechos humanos y la paz sobre los intereses económicos y políticos que, según ella, están llevando a Europa a la complicidad en crímenes internacionales.
Roberta Metsola, por su parte, mantuvo un tono más moderado, enfocándose en la unidad y la democracia, pero sin abordar directamente las críticas de Montero. Metsola enfatizó la importancia de liderar con valores y adherirse al Estado de derecho, mencionando la invasión de Ucrania y la situación en Oriente Próximo en términos generales.