A diferencia de lo que está ocurriendo en las audienciasprovinciales, el Alto Tribunal ha decidido empezar a admitir a trámite losrecursos presentados por los afectados del IRPH.
En auto al que ha tenido acceso Diario16 se indica que elrecurso de casación ha sido admitido porque «se han justificado lospresupuestos que determinan el acceso al recurso».
Por otro lado, la Sala de Civil ha decidido abrir un plazo de20 días en el que las partes «podrán hacer alegaciones sobre la sentencia del TJUEde 3 de marzo de 2020».
Patricia Suárez, presidenta de Asufin, en declaraciones aDiario16, ha afirmado «se están admitiendo los recursos de IRPH presentados enlos primeros meses de 2017. Los estuvieron reteniendo hasta que hubiera unasentencia del TJUE. Ahora los están poniendo en marcha».
Las últimas sentencias de las audiencias provinciales que dabanla razón a la banca han generado cierto pesimismo entre los afectados, lo que, desdealgunos sectores, está siendo interpretado como una estrategia para,precisamente, desincentivar la interposición de recursos y romper la burbuja deoptimismo que la sentencia del TJUE había creado entre las víctimas de esteíndice.
Sin embargo, la decisión de admitir a trámite por parte delSupremo los recursos y la petición de alegaciones respecto a la sentencia delTJUE es un hecho positivo dado que el Alto Tribunal asume, de manera subliminal,que «se encuentra en una situación novedosa», tal y como afirma Patricia Suárez.
Además, según ex magistrados del Supremo, la decisión deadmitir a trámite y preguntar a las partes es algo inédito, nunca se habíavisto nada así.
En consecuencia, el Supremo abre una línea totalmentecontraria a la iniciada (¿coordinadamente?) por las audiencias provinciales que se hanposicionado claramente en contra de lo indicado por el TJUE, hecho por el quese les han interpuesto diferentes querellas por la comisión de un presuntodelito de prevaricación, uno de los más graves que puede cometer un juez, si noel que más.