Pedro Sánchez ha valorado hoy el nuevo acuerdo sobre pensiones alcanzado por su gobierno, las patronales CEOE y Cepyme, y los sindicatos mayoritarios UGT y CCOO. Según el presidente, esto es consecuencia de la «buena política» y «contribuye a una sociedad más justa».
El acuerdo, sellado el pasado mes de julio, incluye cambios en la jubilación demorada y activa, da más papel a las mutuas en algunos tratamientos y regula el retiro para las profesiones penosas. La firma ha tenido lugar en el Palacio de la Moncloa donde Antonio Garamendi y Gerardo Cuerva, presidentes de CEOE y Cepyme, respectivamente, y los secretarios generales de UGT, Pepe Álvarez, y de CCOO, Unai Sordo, ha firmado el acuerdo en presencia de Sánchez y la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz.
El presidente del Gobierno ha destacado este es el cuarto acuerdo firmado por los agentes sociales durante el año 2020. «Ningún acuerdo importante se alcanza sin esfuerzo. Este es un producto más de la buena política que impulsamos desde el equipo de coalición, empresas, trabajadores y grueso de la sociedad civil», ha dicho Sánchez.
El acuerdo incluye la mejora de los incentivos para demorar la edad de jubilación, así como hacerlos compatibles con la jubilación activa, la que permite seguir trabajando más allá de la edad de jubilación y cobrar una parte o toda la pensión.
También se incluye la regulación del marco para la firma de convenios de colaboración entre comunidades autónomas y las mutuas para que puedan colaborar con los servicios públicos de salud en la realización de pruebas diagnósticas en patologías de origen traumatológico. Además, se establece un nuevo procedimiento para el reconocimiento de coeficientes reductores de la edad de jubilación en actividades con elevados índices de penosidad, toxicidad, peligrosidad o insalubridad.
Eso sí, ahora mismo el acuerdo no es más que un compromiso de intenciones puesto que será necesario el desarrollo normativo de los puntos fundamentales incluidos en el pacto. Sánchez se ha hecho la foto con los agentes sociales, pero su gobierno aún no tiene una agenda legislativa concreta que dependerá, evidentemente, de la débil estabilidad parlamentaria.
Por ejemplo, ya ha habido grupos políticos que son socios de Pedro Sánchez que han expresado sus críticas y sus dudas sobre el contenido del acuerdo, sobre todo en lo referente al papel de las mutuas. No hay que olvidar jamás que la reforma laboral tuvo los votos en contra de ERC, BNG y EH-Bildu.