Pedro Sánchez ha lanzado este miércoles en el Congreso uno de los discursos más contundentes de su legislatura. En plena transformación geopolítica mundial, con el regreso del “imperialismo ruso” y el nuevo rumbo de Estados Unidos bajo el mandato de Donald Trump, el presidente del Gobierno ha llamado a Europa a reaccionar. “Ya no podemos asumir que EE UU va a proteger nuestros cielos, nuestras infraestructuras y nuestras fronteras. Tenemos que hacerlo nosotros”, ha sentenciado.
Para Sánchez, Europa se enfrenta a una crisis que solo puede resolverse con más integración, más inversión y más unidad. “Debemos culminar la unión en política exterior, seguridad y defensa”, ha asegurado, reclamando una política común y eficaz que garantice una respuesta conjunta ante amenazas globales cada vez más complejas.
El presidente defiende el gasto en defensa sin tocar lo social
Sánchez ha querido dejar claro que el aumento del gasto en defensa —hasta el 2% del PIB, como exige la OTAN— no irá “en detrimento del estado del bienestar”. “Mientras este Gobierno esté en pie, no habrá recortes en gasto social o medioambiental para financiar la seguridad”, ha prometido, subrayando que ese compromiso fue asumido por Mariano Rajoy en 2014 “sin explicaciones ni votación en el Congreso”.
Sánchez pide un giro histórico en la seguridad europea
Ha recordado que España sufrió el año pasado más de 177.000 ciberataques, de los cuales 1.000 afectaron a infraestructuras críticas. “Rusia y otros actores usan nuevas formas de guerra: drones, virus informáticos, redes sociales, inteligencia artificial…”, ha explicado, defendiendo una modernización urgente del sistema de seguridad europeo.
Un ejército europeo y un nuevo plan industrial
El presidente ha reclamado la creación de un ejército europeo bajo el mando conjunto de los 27. Para ello, ha apoyado las medidas del Libro Blanco de la Defensa presentado recientemente, que plantea compras conjuntas, formación, innovación e impulso industrial.
Antes del verano, el Gobierno presentará un plan de desarrollo de la industria tecnológica y militar española. “Miramos al Este, porque su seguridad también es la nuestra, pero también al Sur, apostando por innovación y empleo de calidad”, ha subrayado.
El presidente ha planteado que la UE financie este impulso militar a través de transferencias directas a los Estados, como ocurrió con los fondos Next Generation tras la pandemia. “No lo hacemos por España, porque sabemos que irán sobre todo al Este, pero es la mejor vía para garantizar una respuesta solidaria y efectiva”, ha argumentado.
Una advertencia clara a Trump
La posible imposición de aranceles del 25% por parte de Trump a países que compren petróleo a Venezuela ha provocado también la reacción del presidente español, que ha anunciado una respuesta “proporcional, unitaria e inteligente” de la UE. “Pedimos a Estados Unidos que dialogue con Bruselas, que construya puentes, no muros”, ha reclamado. “Y si no lo hace, Europa sabrá defenderse”.
En paralelo, Sánchez ha anunciado viajes a China y Vietnam, y una ronda de contactos con América Latina para diversificar los vínculos comerciales de la UE. “Europa es una potencia y debe comportarse como tal, con voz propia”, ha sentenciado.
Feijóo acusa a Sánchez de falta de seriedad
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha arremetido contra Sánchez con un discurso cargado de reproches. Le ha acusado de “frivolidad”, de “engañar a la UE y la OTAN” y de querer “imponer un aumento del gasto militar sin explicar los Presupuestos”. También ha criticado que negocie con Bildu “la compra de armas” y ha rechazado cualquier pacto de Estado con el actual Gobierno.

“El PP no es el escollo. El escollo es usted”, le ha dicho. Y ha zanjado: “O se somete a las Cortes, o se somete a las urnas”.
Abascal evita criticar a Trump y ataca a Von der Leyen... como emperador galáctico
Más allá de la tensión habitual, Santiago Abascal sorprendió este miércoles al comparar a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, con el emperador Palpatine de La Guerra de las Galaxias. Según el líder de Vox, Von der Leyen quiere “montar un ejército personal desde Bruselas”, en referencia al proyecto europeo de defensa común. Un símil tan exagerado como revelador del rechazo ultra a cualquier integración europea.
Eso sí, Abascal evitó cualquier crítica directa a Donald Trump, pese a que el republicano ha dado la espalda a Europa en defensa y ahora amenaza con una guerra comercial. En su lugar, culpó a “populares y socialistas” de “romper el vínculo atlántico”, acusó a Sánchez de “provocar los aranceles” y se centró en su discurso habitual sobre inmigración y fronteras, incluso denunciando que Ceuta suspenda sesiones por el Ramadán.

Sumar pide un modelo de seguridad no subordinado a la OTAN
Desde Sumar, la portavoz Verónica Barbero pidió “abanderar un modelo europeo de seguridad independiente y soberano”. En su intervención, rechazó que el debate se limite a “cuánto gastar” y denunció que una visión “puramente militar” erosiona la democracia. “La seguridad es también energía, tecnología, industria, ciberdefensa. No puede hacerse a costa del gasto social”, ha defendido.
Además, advirtió de que “los enemigos de Europa tienen aliados dentro de nuestros parlamentos”, señalando a Vox como “súbdito de los oligarcas estadounidenses” que quieren debilitar la UE desde dentro.

Cambio de era
El discurso de Sánchez supone un cambio de era: dejar de confiar ciegamente en EE UU y apostar por una Europa fuerte, unida y responsable de su propia seguridad. Pero ese camino no será fácil. Ni la derecha tradicional ni la extrema derecha parecen dispuestas a acompañarlo. Una lo acusa de falta de credibilidad. La otra, directamente, quiere bajarse del tren europeo.
En un mundo cada vez más inestable, Europa se enfrenta al dilema de ser actor o ser rehén. Y como advirtió Sánchez, “si queremos garantizar la paz, necesitamos ser valientes”.