El nuevo presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, deja claro que las claves destructivas que desde la oposición mantenía su antecesor, Pablo Casado, no han cambiado y,continúa con el mantra que desde el inicio de la legislatura repiten los populares desde sus púlpitos cuando tienen ocasión: Es necesario adelantar elecciones.
Feijóo ha señalado que el presidente del Gobierno convocará elecciones "cuando más le convenga" porque hasta ahora "ha hecho en cada momento lo que más le convenía", si bien ha admitido que la situación también "depende de la mitad de su Gobierno y de sus aliados parlamentarios".
Aunque de forma sibilina, Feijóo insiste en que este Gobierno tomará las decisiones según le convenga a Pedro Sánchez, a lo que añade, "como siempre".
El líder del PP ha sacado pecho y se ha atrevido a asegurar que el PP "protege al Estado" y que precisamente por eso su formación votó "no" a una comisión de investigación solicitada por Podemos y los socios de investidura de Sánchez que lo que "pretende es desvestir y desnudar al Estado".
El más que conocido por los gallegos como "enemigo de lo público", que para sus filas es sinónimo de "buen gestor", ha asegurado que el PSOE "ha debilitado" al Estado para "resistir en el Gobierno", lo que viene a ser lo mismo que decía Casado cuando afirmaba que Sánchez lo único que perseguía era mantenerse en Moncloa.
Mismo perro y mismo collar ostentan ahora el liderazgo del Partido Popular. Feijóo,tras criticar la "gesticulación" con la que actúa el Gobierno y el "grado de dependencia" de Sánchez de Podemos y los independentistas, ha denunciado también el "desprecio" del jefe del Ejecutivo al plan económico que le envió su partido para aliviar la carga de las rentas medias y bajas ante la inflación.
Alberto Núñez Feijóo, al igual que cualquier voz "popular" parece no entender de aritmética parlamentaria e insiste en la "dependencia" de Sánchez de Podemos y otras formaciones políticas que apoyaron su investidura y algunas de las iniciativas del Gobierno.
El diálogo, los pactos y los avances que por parte de este Ejecutivo se han alcanzado en España durante la presente legislatura, y por qué no decir, los sacrificios que se han tenido que adoptar para aliviar los efectos de todas las dificultades con las que España se ha topado en los últimos años, no le interesan a Feijóo ni a nadie del Partido Popular.
Feijóo ha denunciado también el "desprecio" del jefe del Ejecutivo al plan económico que le envió su partido para aliviar la carga de las rentas medias y bajas ante la inflación.
En cabeza de nadie cabría aceptar un plan económico para paliar los efectos de las diferentes crisis coyunturales que afronta España derivadas de la pandemia, la erupción del volcán en Canarias, las inundaciones, la sequía y por último la guerra en Ucrania. La razón: Los antecedentes de Feijóo en su tierra, Galicia, en la que ha dejado la Sanidad bajo mínimos, la educación en cuadro y, cualquier servicio público,que de la Xunta dependa, en estado de coma.