El Tribunal Supremo de España ha iniciado un proceso penal contra el senador del Partido Popular (PP), Baltar Blanco, por presunto delito contra la seguridad vial. La acusación se basa en un incidente ocurrido en abril, donde Baltar fue detectado conduciendo a 215 km/h en una autovía de Zamora. Este hecho ha provocado una amplia repercusión, ya que el también expresidente de la Diputación de Orense ya había enfrentado una sanción en mayo por un incidente similar, siendo multado con 600 euros y la pérdida de seis puntos en su licencia de conducir.
El caso tomó un giro cuando el Supremo, al confirmar que Baltar es senador en la actual legislatura, solicitó un informe a la Fiscalía y tomó la decisión de declarar la competencia de la Sala para conocer el caso. La Fiscalía, basándose en las pruebas acumuladas, solicitó la notificación al denunciado y la emisión del correspondiente Suplicatorio.
El procedimiento legal ha tenido sus complicaciones. Inicialmente, Baltar iba a ser juzgado mediante un juicio rápido en el Juzgado de Instrucción de Puebla de Sanabria, Zamora, pero el juicio se suspendió en dos ocasiones: primero por la incomparecencia de su abogado y luego porque Baltar rechazó aceptar las penas propuestas por la Fiscalía. Este rechazo llevó el caso a manos del Juzgado de lo Penal de Zamora.
Estos acontecimientos han generado una notable polémica en el ámbito político, especialmente considerando que Baltar fue propuesto como representante de Galicia en la Cámara Alta poco después de renunciar a la presidencia de la Diputación Provincial de Ourense, cargo que había ocupado durante 11 años. Este cambio en la Diputación marcó el fin de más de tres décadas de dominio del apellido Baltar en la institución, sucediendo a su padre José Luis Baltar.
