Satisfacción en el seno de la Comisión Europea por el acuerdo alcanzado por los líderes del G7 sobre los principios rectores internacionales sobre la inteligencia artificial (IA) y un código de conducta voluntario para los desarrolladores de IA en el marco del proceso de IA de Hiroshima.
Estos principios y el Código de Conducta voluntario complementarán, a nivel internacional, las normas jurídicamente vinculantes que los colegisladores de la UE están ultimando actualmente en virtud de la Ley de IA de la UE.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, que estuvo entre quienes suscribieron la declaración de los líderes del G7 emitida por la presidencia japonesa del G7 en 2023, ha manifestado que «los beneficios potenciales de la Inteligencia Artificial para los ciudadanos y la economía son enormes». Sin embargo, cree que «la aceleración de la capacidad de la IA también plantea nuevos desafíos. La UE, que ya es pionera en materia regulatoria con la Ley de IA, también está contribuyendo a las barreras de seguridad y la gobernanza de la IA a nivel mundial. Me complace dar la bienvenida a los Principios Rectores internacionales del G7 y al Código de Conducta voluntario, que reflejan los valores de la UE para promover una IA confiable. Hago un llamamiento a los desarrolladores de IA para que firmen e implementen este Código de conducta lo antes posible».
Garantizar la seguridad y confiabilidad de la tecnología
Los once Principios Rectores adoptados por la UE y el G7, brindan orientación a las organizaciones que desarrollan, implementan y utilizan sistemas avanzados de IA, como modelos básicos e IA generativa, para promover la seguridad y la confiabilidad de la tecnología. Incluyen compromisos para mitigar los riesgos y el uso indebido e identificar vulnerabilidades, fomentar el intercambio responsable de información, la notificación de incidentes y la inversión en ciberseguridad, así como un sistema de etiquetado para permitir a los usuarios identificar el contenido generado por IA.
Basados en los resultados de una encuesta a las partes interesadas , estos principios han sido desarrollados conjuntamente por la UE con los demás miembros del G7, en el marco del Proceso de Inteligencia Artificial de Hiroshima. Los Principios Rectores, a su vez, han servido como base para compilar un Código de Conducta, que proporcionará orientación detallada y práctica para las organizaciones que desarrollan IA.
El Código de Conducta voluntario también promoverá la gobernanza responsable de la IA a nivel mundial. Ambos documentos se revisarán y actualizarán según sea necesario, incluso mediante consultas inclusivas de múltiples partes interesadas, para garantizar que sigan siendo adecuados para su propósito y respondan a esta tecnología en rápida evolución. Los líderes del G7 han pedido a las organizaciones que desarrollan sistemas avanzados de IA «que se comprometan con la aplicación del Código de Conducta Internacional. Los primeros firmantes se anunciarán en un futuro próximo».
Proceso de Inteligencia Artificial de Hiroshima del G7
El Proceso de Inteligencia Artificial de Hiroshima del G7 se estableció en la Cumbre del G7 el 19 de mayo de 2023 para promover barreras de seguridad para sistemas avanzados de IA a nivel global. La iniciativa es parte de una gama más amplia de debates internacionales sobre barreras para la IA, incluso en la OCDE, la Asociación Global sobre Inteligencia Artificial (GPAI) y en el contexto del Consejo de Comercio y Tecnología UE-EE.UU. y las Asociaciones Digitales de la UE.
Desde que anunció por primera vez su intención de trabajar en un Código de Conducta en la Ministerial TTC del 31 de mayo de 2023, la Comisión Europea viene trabajando «con socios internacionales clave en el G7 para desarrollar los principios y el Código de Conducta sobre IA». Según la Comisión Europea, «estos compromisos internacionales son coherentes con las normas jurídicamente vinculantes que se están negociando actualmente como parte de la Ley de Inteligencia Artificial más completa (Ley de IA de la UE), que se aplicará en la UE».
La propuesta de Ley de IA de la UE pretende garantizar la seguridad y los derechos fundamentales de las personas y las empresas, al tiempo que fortalecer la adopción, la inversión y la innovación de la IA en toda la UE. La Ley de IA establecerá normas jurídicamente vinculantes basadas en el riesgo para los sistemas de IA que se comercialicen o se pongan en servicio en el mercado de la Unión.
