“Tras los enfrentamientos mortales de los últimos 12 días entre Israel e Irán, el acuerdo de alto el fuego es una oportunidad para evitar una escalada catastrófica y lograr una solución pacífica de la cuestión nuclear de Irán”. Así se ha expresado en las últimas horas, la encargada de Asuntos Políticos en la ONU.
Rosemary DiCarlo ha participado en una sesión del Consejo de Seguridad de la ONU sobre no proliferación, en la que se discutió sobre el Plan de Acción para las actividades nucleares de Irán que, según la resolución 2231 del órgano de seguridad, expira en menos de cuatro meses sin que se hayan logrados sus objetivos.
Para la secretaria general adjunta, “la diplomacia, el diálogo y la verificación” son el camino a seguir “para garantizar el carácter exclusivamente pacífico del programa nuclear iraní y generar beneficios económicos concretos para el pueblo de Irán”.
La ONU seguirá apoyando la implementación de la resolución 2231
En este sentido, DiCarlo ha señalado la disposición de la ONU a apoyar todos los esfuerzos que promuevan la paz, el diálogo y la estabilidad en Medio Oriente.
Asimismo, ha dicho que las Naciones Unidas seguirán abogando por la aplicación de la resolución hasta su vencimiento, el 18 de octubre.
DiCarlo ha recordado que ese documento se adoptó con el fin de garantizar que el programa nuclear iraní fuera exclusivamente pacífico e incluía el alivio de las sanciones, las restricciones al programa nuclear y la supervisión y verificación.
En 2018, Estados Unidos, uno de los firmantes del plan de seis partes se retiró, por lo que Irán se apartó de algunos de sus compromisos marcados en esa iniciativa.
Este año, Irán y Estados Unidos reanudaron las negociaciones bilaterales sobre el Plan pero, en vísperas de una ronda de ellas, Israel bombardeó objetivos nucleares y militares iraníes, desatando una nueva escalada de violencia en la región que dio al traste con las perspectivas de apegarse a la resolución.
El ataque estadounidense del fin de semana a tres instalaciones nucleares iraníes complicó aún más la situación, e Irán las exacerbó al responder lanzando misiles a una base militar estadounidense en Qatar.
Logro significativo
En este escenario, el alto el fuego anunciado por el presidente estadounidense Donald Trump es, de acuerdo con las palabras de DiCarlo, “un logro significativo que potencialmente aleja a Irán, Israel y la región del borde del abismo”.
La funcionaria ha informado de que las autoridades sanitarias iraníes reportan al menos 606 muertos desde el inicio de las hostilidades el 13 de junio. De ellas, 107 sucumbieron en las últimas 24 horas. Los heridos superan los 5.300.
En Israel, los decesos suman 28 y los lesionados 1.472.
Aumento del uranio enriquecido
DiCarlo se ha referido al aumento preocupante de la producción y acumulación de uranio altamente enriquecido en Irán, según del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
Al tiempo, el OIEA ha aceptado haber perdido la continuidad de sus conocimientos de muchos aspectos del programa iraní por no poder realizar inspecciones durante más de cuatro años, por lo que ignora a cuánto ascienden las existencias de uranio enriquecido en el país.
Pese a estas denuncias del OIEA, DiCarlo ha apuntado que siguen en vigor las medidas referentes a las actividades de transferencias nucleares, y ha aseverado que la ONU no ha recibido información de violaciones de esas disposiciones. Tampoco se han presentado nuevas propuestas en el canal de adquisiciones, ha añadido.
Acuerdo de JCPOA
El JCPOA fue un acuerdo alcanzado en 2015 entre Irán y el P5+1, respaldado por la Resolución 2231 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, con el fin de garantizar que el programa nuclear de Irán siguiera siendo pacífico.
A cambio del levantamiento de las sanciones, Irán aceptó límites estrictos en materia de enriquecimiento de uranio, reservas y centrifugadoras.
El OIEA, en el marco de las Naciones Unidas, se encargó de verificar el cumplimiento y de informar al Consejo de Seguridad.
El acuerdo comenzó a desmoronarse después de que Estados Unidos se retirara en 2018, lo que llevó a Irán a superar los límites del JCPOA.
El JCPOA se encuentra ahora estancado, con una cooperación cada vez menor y continuos llamamientos de las Naciones Unidas para que se renueve la diplomacia y se cumpla el acuerdo.