Israel viola las leyes de guerra aplicadas durante 160 años

Evacuaciones forzadas, ataques sistemáticos a civiles y hospitales, y uso de municiones prohibidas, como el fósforo blanco, son algunas de las transgresiones israelíes en Gaza en más de un año de la guerra que ha dejado más de 43.000 gazatíes muertos

12 de Noviembre de 2024
Actualizado a las 10:05h
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Israel bombardeó el patio del hospital Al Aqsa en Gaza, donde la gente buscaba refugio. |Foto: UNRWA
Israel bombardeó el patio del hospital Al Aqsa en Gaza, donde la gente buscaba refugio. |Foto: UNRWA 

“Las violaciones sin precedentes del derecho internacional humanitario en Gaza dan lugar a temores de que se estén cometiendo crímenes atroces. La violencia debe cesar de inmediato”, ha dicho el Alto Comisionado de las Naciones Unidos para los Derechos Humanos, Volker Türk.

Las acciones de las fuerzas israelíes en la Franja de Gaza desde el inicio de la ofensiva militar, tras los ataques liderados por Hamas contra el sur de Israel el 7 de octubre de 2023 "han violado las leyes de la guerra y de los derechos humanos", afirma un informe de la Oficina del Alto Comisionado,

La publicación destaca la grave situación de las garantías fundamentales en el territorio palestino asediado, recordando que los muertos suman ya más de 43.000. La ONU ha verificado más de 8.000 de esos asesinatos y el 70% de ellos son mujeres y niños.

Asimismo, detalla “la realidad horrible que vive la gente de Israel y Gaza” desde hace trece meses.

El informe acusa el incumplimiento continuo de las normas de la guerra que se han aplicado durante 160 años, aseverando que la forma en que las partes en el conflicto en Gaza han llevado a cabo las hostilidades ha provocado un espantoso sufrimiento humano.

Los métodos de guerra de Israel en particular “han implicado graves violaciones de las leyes internacionales de derechos humanos y del derecho internacional humanitario”, agrega el análisis.

Türk ha advertido repetidamente “del riesgo de que se estén cometiendo crímenes atroces”.

El informe plantea preocupación sobre las acciones de las fuerzas israelíes con respecto a los traslados forzados, los ataques a hospitales de manera aparentemente sistemática y los ataques a periodistas.

“También destaca las denuncias sobre el uso de municiones de fósforo blanco”, ha comentado el Alto Comisionado.

Crímenes de guerra, contra la humanidad y genocidio

El análisis detallado de las violaciones comprende el periodo de noviembre de 2023 a abril de 2024, y examina ampliamente el asesinato de civiles y las violaciones del derecho internacional que en muchos casos podrían constituir crímenes de guerra.

Si estas violaciones se cometen como parte de un ataque generalizado o sistemático dirigido contra una población civil, en cumplimiento de una política estatal o de una organización, estas violaciones pueden constituir crímenes contra la humanidad, apunta el informe. También subraya que si los abusos se perpetran con la intención de destruir, total o parcialmente, a un grupo nacional, étnico, racial o religioso, “pueden constituir genocidio”.

Se debe hacer justicia frente a estas graves violaciones de las leyes internacionales”, ha puntualizado el Alto Comisionado.

Obligación de los Estados

En este sentido, Volker Türk ha hecho enfasis en que los Estados” tienen la obligación de actuar para evitar los crímenes atroces”, y los ha urgido “a apoyar el trabajo de los mecanismos de rendición de cuentas, incluida la Corte Penal Internacional, para ejercer la jurisdicción universal e investigar y juzgar los crímenes en consonancia con las leyes internacionales en tribunales nacionales”.

Del mismo modo los ha conminado a cumplir con las peticiones de extradición.  “La violencia debe cesar de inmediato, los rehenes y las personas detenidas arbitrariamente deben ser liberados y debemos centrarnos en inundar Gaza con ayuda humanitaria”, ha recalcado.

Todos se sienten condenados a la muerte

En tanto, la Oficina para Asuntos Humanitarios (OCHA) ha hecho hincapié en la angustia que impera entre los gazatíes. “Todos se sienten como si los hubieran puesto en el corredor de la muerte. Si no los matan bombas o balas, se están asfixiando lentamente por la falta de los medios básicos de supervivencia. La única diferencia es la velocidad a la que cada uno muere”, ha ecplicado Jonathan Whittall, jefe interino de OCHA en los territorios palestinos ocupados.

Whitthall ha hablado también sobre la desesperación de quienes quedan atrapados bajo los escombros, y ha relatado que los trabajadores de rescate tratan de llegar a las personas que gritan pidiendo ayuda sin poder hallarlas antes de que los gritos se silencien. “Después de excavar entre los escombros con las manos desnudas, porque Israel no permite el uso de combustible para el equipo, los voluntarios de defensa civil a menudo recuperan sólo cadáveres”, ha lamentado.

Whitthall ha deplorado que los que tienen el poder de cambiar la situación carezcan de la voluntad o el coraje para hacerlo. “La asistencia humanitaria no es la solución a los fracasos políticos. Estas atrocidades deben terminar. Las medidas de la Corte Internacional de Justicia deben implementarse y los perpetradores deben rendir cuentas”, ha puntualizado.

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