Una columna de humo rosa se elevó este miércoles sobre el Vaticano como signo de protesta y esperanza. Mientras los 133 cardenales electores se reunían en la Capilla Sixtina para elegir al nuevo Papa, un grupo de mujeres católicas alzaba su propia señal al cielo: un llamado urgente a la inclusión y la igualdad en el seno de la Iglesia.
Frente a la solemne tradición del cónclave, reservado exclusivamente a hombres ordenados, la Organización por la Ordenación de Mujeres en todo el Mundo (Women's Ordination Worldwide, WOW) organizó una acción simbólica que no pasó desapercibida. La fumata rosa, inspirada en el icónico humo blanco y negro que anuncia el resultado de las votaciones papales, buscó reclamar el lugar de las mujeres en las decisiones más trascendentales de la Iglesia.
“El lugar de la mujer está en el cónclave”, afirmaron con firmeza en un comunicado. A través de cantos, oraciones y humo teñido de rosa, las activistas quisieron recordar a los cardenales que millones de mujeres católicas sienten el llamado al ministerio, pero se les niega sistemáticamente la posibilidad de responder desde el altar.
En su mensaje, las representantes de WOW denunciaron que la exclusión de las mujeres del sacerdocio no solo representa una injusticia espiritual, sino también una pérdida generacional para la Iglesia. “La igualdad de las mujeres no puede esperar”, insistieron, alertando del dolor que implica tener que justificar una vocación que, de haber sido masculina, habría sido acogida sin reservas.
Reconocen que el Papa Francisco ha abierto un espacio para el diálogo y ha dado pasos hacia una mayor inclusión. Sin embargo, denuncian que esos avances son aún insuficientes. “Oramos por un nuevo pontífice que abrace la sinodalidad y corrija la injusticia de excluir a las mujeres del ministerio ordenado”, concluyeron.
En un momento en que el mundo observa expectante el humo que saldrá de la Capilla Sixtina, otra señal asciende desde la plaza: la exigencia de una Iglesia verdaderamente universal, donde también las voces femeninas cuenten y lideren.