La matanza de civiles en las zonas costeras del noroeste de Siria debe cesar de inmediato, ha dicho el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk , tras una serie de ataques coordinados lanzados por elementos del antiguo gobierno y otros hombres armados locales, que habrían provocado la muerte de un millar de personas.
«Estamos recibiendo informaciones extremadamente preocupantes de familias enteras, incluidas mujeres, niños y no combatientes, que han sido asesinados», ha dicho Türk en un comunicado.
«Hay informes de ejecuciones sumarias de carácter sectario por parte de autores no identificados, por miembros de las fuerzas de seguridad de las autoridades de facto, así como por elementos asociados con el antiguo gobierno».
Grupos que aterrorizan a la población civil
Según ha afirmado, los anuncios de las autoridades de facto sobre su intención de respetar la ley deben ir seguidos de "acciones rápidas para proteger a los sirios", incluyendo la adopción de todas las medidas necesarias para prevenir cualquier violación y abuso y lograr la rendición de cuentas cuando se produzcan.
Estos sucesos, así como el continuo aumento de la incitación al odio tanto en la red como fuera de ella, ilustran una vez más la urgente necesidad de un proceso integral de justicia transicional que sea de titularidad nacional, inclusivo y centrado en la verdad, la justicia y la rendición de cuentas, ha concluido Türk.