El presidente de la República Árabe Saharaui Democrática, Brahim Ghali, ha sido hospitalizado en España por Covid19. Este hecho ha provocado una crisis diplomática iniciada por Marruecos en la que el país alauita se ha dedicado a amenazar a nuestro país, incluso con la ruptura de relaciones diplomáticas. Realmente, ¿qué le aporta a España mantener relaciones con un país que vulnera los derechos humanos y ocupa ilegalmente territorio español, tal y como ha reconocido la ONU y confirmó el propio ministro Fernando Grande Marlaska en un auto de la Audiencia Nacional. La propia ministra de Exteriores, Arantxa González Laya, afirmó que el señor Ghali está ingresado por razones humanitarias, algo que Marruecos, como ejemplo de país violador recalcitrante de los derechos humanos, no entiende.

Naser Burita, ministro de Exteriores marroquí, en una entrevista concedida a EFE, se ha preguntado si España «desea sacrificar su relación bilateral» por el ingreso hospitalario Brahim Ghali, y que Marruecos sigue esperando «una respuesta satisfactoria y convincente» sobre ese asunto por parte España. Como se puede comprobar, las razones humanitarias no son suficientes para Marruecos.

«¿Por qué las autoridades españolas consideraron que no había que informar a Marruecos [respecto a la llegada de Ghali a España]?, ¿por qué prefirieron coordinar con los adversarios de Marruecos [en alusión a Argelia]?, ¿es normal que nos hayamos enterado por la prensa?», insistió Burita. Una pregunta que subyace a esta pregunta es ¿por qué España tiene que informar a Marruecos de que un ciudadano nacido en territorio español ha viajado para ser hospitalizado?

Sin embargo, Burita ha continuado con sus amenazas al afirmar que esta situación es una prueba «sobre la fiabilidad de nuestra relación y su sinceridad, y sobre si son algo más que un eslogan […] Cuando España se enfrentaba al separatismo, Marruecos fue muy claro, y al más alto nivel: rechazando todo contacto e interacción con ellos e informando a nuestros socios. Cuando nos pedían que los recibiéramos en el ministerio, exigíamos que alguien de la Embajada de España estuviera presente», ha afirmado el ministro marroquí sin contar con un pequeño matiz: Cataluña es territorio español y el Sáhara Occidental no lo es de Marruecos porque la ONU declaró ilegales los Acuerdos de Madrid de 1975 que entregó la administración del territorio al país alauita y a Mauritania. Además, Naciones Unidas sólo reconoce como potencia administradora del Sáhara a España.

Sin embargo, y a pesar de los hechos y del derecho internacional, Burita, como Paco Martínez Soria, continúa como «don Erre que Erre»: «Con los socios no se maniobra por la espalda para una cuestión [el Sáhara] que es fundamental para Marruecos». Sin embargo, Burita no paró en sus amenazas veladas al dejar en el alero la reunión de alto nivel prevista para el próximo mes de diciembre.

Marruecos acusa a España de maquinar con el Sáhara

Según Burita, España y Marruecos tienen una alianza global: «político, económico, comercial, humano y policial»». Tal y como bien manifestó el exministro español José María García-Margallo, ahí llegó el chantaje marroquí al poner la cuestión migratoria sobre la mesa y afirmar que no se puede pensar que las relaciones entre Marruecos y España son «a la carta: cuando se trata [por España] de maquinar con Argelia y el Polisario, Marruecos sale de la pantalla del radar de España, pero cuando hablamos de emigración o del terrorismo, volvemos a ser importantes».

Estas palabras son el preámbulo perfecto para lanzar la amenaza definitiva al afirmar que Marruecos se niega a ser el policía de la Unión Europea en cuestión migratoria: «La emigración necesita un tratamiento global, no solo financiero: debemos ser asociados a la visión, a la formulación de estrategias, y no solo a su puesta en marcha a cambio de una cantidad de dinero».

La cuestión es, ¿hasta cuándo va a aguantar España estas amenazas de Marruecos? ¿Y la Unión Europea? ¿Hasta cuándo España va a dejar de reconocer al Sáhara Occidental como una parte de su territorio y convocar, de manera definitiva, el referéndum de autodeterminación que exige la ONU? Lo peor es que el gobierno español volverá a someterse a las presiones, al chantaje y a las amenazas. ¿Es que Mohamed VI no tiene bastante con las decenas de millones de euros que España ha regalado a Marruecos en equipamiento bélico?

5 COMENTARIOS

  1. A España siempre la están chantajeando , ahora es Marruecos . Para acabar con los chantajes, franceses , belgas y demás, España tiene que ser una potencia militar que infunda respeto y no depender de nadie , ni OTAN ni EU ni el carajo , España no puede fiarse de nadie , solamente de si misma

  2. Hace ya mucho tiempo que España debería haber cortado con cualquier tipo de relación con Marruecos. Marruecos es un cortijo de Estados Unidos, lleno de corrupciones y de gente que pasa hambre y todo tipo de necesidades, mientras su clase política y dirijen te, nadan en la abundancia. Marruecos nunca ha sido un país amigo y fiable. Es hora de cortar por lo sano.

  3. Por que no ha mencionado que Brahim Ghali entró con una falsa identidad? Y las demandas judiciales por genocidio, violación,..??

    Solo espero que no haya alguien que se informó sobre el asunto leyendo solamente su articulo.

  4. La traición siempre trae consecuencias. Pero si la traición es coronada, las consecuencias son mucho más desastrosas. La corona ensangrentada nos ha costado y, nos está costando, mucha vergüenza y muchos quebraderos de cabeza. Primero un genocidio, después una bajada de pantalones coronados y, ahora, una amenaza directa de un sátrapa criminal. ¿Para cuando poner las cosas claras y defender nuestros compatriotas? ¿Tenemos o no tenemos la Comunidad Europea detrás? Tenemos o, no tenemos las fuerzas suficientes, para poner las cosas en su sitio? La traición al ejército de la RDAS por una corona ensangrentada merecería dar la oportunidad a este belicoso ejército, de cambiar la memoria. Quizás estos uniformados preferirían combatir a pasearse con una estatua por las calles.

DEJA UNA RESPUESTA

Comentario
Introduce tu nombre