El actual y predominante modelo agropecuario nos está dejando un agua tóxica. La ganadería industrial, con sus excesivos excrementos derivados de la elevada concentración de animales en macrogranjas, y la agricultura industrial, con su uso masivo de fertilizantes, están envenenando el bien más preciado. Ambas actividades están generando una cantidad de nitratos completamente anómala que el medio ambiente no puede soportar y que están acabando en las aguas, según un reciente informe de Greenpeace.
La contaminación del agua por nitratos está afectando a todo tipo de aguas en España, desde las aguas superficiales a las subterráneas, más importantes aún en un escenario de cambio climático y escasez de agua, ya que son las reservas del futuro. Pero esta contaminación tiene también un impacto directo en los ecosistemas naturales y en el propio abastecimiento humano.
¿Y quién vigila este problema? El Ministerio de Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITERD) cuenta con 4.157 estaciones de control en aguas subterráneas que miden la concentración de nitratos en el agua, unas 8,2 estaciones por cada 1.000 kilómetros cuadrados. Seguramente, una vigilancia más amplia podría poner en evidencia un problema aún más grave del conocido y la necesidad de actuar de forma contundente y sin demoras.
Por este motivo, desde Greenpeace hemos impulsado la creación de la Red Ciudadana de Vigilancia de la Contaminación del Agua por Nitratos. En el último año, numerosos colectivos y personas voluntarias han realizado distintas mediciones con unos aparatos que distribuimos para conocer la concentración de nitratos en el agua en sus municipios.
Ahora hemos recogido las mediciones de este proyecto de participación ciudadana para exigir un agua limpia y acabar con las actividades que están detrás de su envenenamiento, como las macrogranjas.
La contaminación del agua por nitratos es un problema serio. Pero, ¿qué son exactamente los nitratos y por qué son peligrosos para la salud humana y el medioambiente?
Los nitratos son nutrientes que se encuentran naturalmente en el medioambiente. Están formados por tres átomos de oxígeno, uno de nitrógeno y una carga negativa (NO3-). No tienen color ni sabor y se encuentran en la naturaleza tanto en los suelos como disueltos en el agua.
Los nitratos, como otros nutrientes, se desplazan entre lugares donde no están fácilmente disponibles para los organismos, llamados sumideros a largo plazo (por ejemplo, rocas y sedimentos), y lugares en el medioambiente donde están disponibles para plantas y animales (por ejemplo, agua o humus). Pueden ser absorbidos por los organismos vivos.
Sin embargo, estos ciclos pueden verse alterados por actividades humanas como la producción y el uso de fertilizantes artificiales y el uso de los excrementos de animales como fertilizantes, muy ricos en nitratos. Aunque los nutrientes como los nitratos son esenciales para la vida, cambiar sus cantidades presentes en el medio ambiente puede tener impactos negativos significativos en los ecosistemas y afectar incluso la salud humana.
La organización SEO/BirdLife denuncia la "falta de ambición" del Gobierno en la política de agua porque el 42,1 por ciento de las aguas superficiales y el 46,9 por ciento de las subterráneas están en mal estado, sobre todo por la contaminación por nitratos de origen agrario, y con los que no se alcanzarían los objetivos ambientales que plateó España a la Comisión Europea para cumplir antes de 2021.
Igualmente, afirma que menos del 10 por ciento de las masas cuenta con el régimen de caudales ecológicos obligatorios o no cumple los caudales mínimos de los ríos, como en el caso del Miño-Sil dónde el 88 por ciento de los ríos no llega a los mínimos, y alerta de la inacción, ya que más del 70 por ciento de las medidas que se plantearon ejecutar hasta el 2021, se descartaron o no se conoce su situación.
La organización lamenta la "poca" ambición del Gobierno español que tras el Consejo Nacional del Agua en el que la organización participa como vocal, concluye que con el informe de seguimiento del estado de la planificación hidrológica hasta 2020 y la votación de dos proyectos de Real Decreto, relacionados a la reglamentación de esta y al control de la contaminación, los objetivos ambientales son "imposibles" de cumplir.
Además, la ONG observa una "insuficiente" delimitación entre los conceptos básicos de sequía y escasez, que implica que ante las situaciones de escasez que derivan de una mala gestión se tomen medidas que deberían ser extraordinarias, que normaliza el carácter excepcional y obvia la necesaria mejora de la planificación de usos.