La anunciada financiación singular para Cataluña está siendo el comentario político del momento con declaraciones como la siguiente: Si ello significa que las demás comunidades tengamos que pagar más impuestos, no voy a permitir que los ciudadanos de Baleares tengan que pagar el regalo que Pedro Sánchez quiere hacer a los catalanes.
Estas ha sido las declaraciones de la presidenta del gobierno Balear, Marga Prohens, para subrayar el apoyo contra la financiación singular de Catalunya que, según el manifiesto publicado del Partido Popular, parece ser su primera y única acción al inicio del nuevo curso político.
El mismo está firmado por Feijóo, como presidente del Partido Popular, y por los once presidentes autonómicos del PP (entre ellos la balear Marga Prohens), ya que en esta etapa el PP ha decidido apoyarse en el poder territorial acumulado en las elecciones autonómicas y municipales de mayo del pasado año.
Las palabras de Prohens son, ni más ni menos, la adaptación balear de un argumentario de partido que oiremos repetir a todos los barones del PP con muy pocas diferencias, cambiando apenas las referencias que correspondan a cada comunidad: No voy a consentir que los murcianos..., No voy a permitir que los castellanoleoneses…, No voy a tolerar que los andaluces... etc. El manifiesto, es un amplio cúmulo de distorsiones y conjeturas (como que la nueva financiación podría servir para pagar un nuevo proceso independentista), así como tópicos del discurso de la derecha española, como que Pedro Sánchez y sus aliados en Catalunya pretenden modificar la Constitución y el modelo de estado por la puerta de atrás.
Lo de hacer cosas por la puerta de atrás (por ejemplo, en la Sala de lo Penal del Supremo) es un recurso que en el PP se tiene siempre a mano, como explicitó el entonces senador Ignacio Cosidó. Pero lo que más llama la atención es la referencia a los catalanes que hace Prohens -una Isabel Diaz Ayuso de segunda división- y dicho con toda la intención.
No a los independentistas…, No al gobierno catalán, o a cualquier enemigo igualmente inventado, pero mínimamente acotado. Los catalanes es la entidad difusa, inconcreta, pero perfectamente identificada, contra la que hay que dirigir suspicacias, rencores y odios cada vez que se produce en España una urgencia nacional, que es otra expresión que se puede leer en el manifiesto del PP antes mencionado.
Es la llamada: todo el mundo alerta, que nos atacan los catalanes. Son los mismos de aquel écheme una firmita contra los catalanes, con la que el PP llenó las plazas y calles de España recogiendo firmas contra el Estatut, que efectivamente acabó laminado por el Tribunal Constitucional después de haber sido votado por los ciudadanos y los Parlamentos catalán y español.
Vean la opinión del catedrático Javier Pérez Royo sobre la sentencia del Tribunal Constitucional.
Los catalanes son los mismos del “a por ellos, oé, oé”. Quiere decir que el Partido Popular se prepara para incrementar su ofensiva contra Pedro Sánchez, y que para ello no dudará en volver a remover las sucias aguas de la xenofobia contra los catalanes (y a la que se apunta, indignamente, la presidenta de las Baleares). De momento, da la impresión que se repetirá la película del Estatut.
Por cierto, salvo error por mi parte, no recuerdo que ningún miembro del TC que dictó la sentencia haya dicho por que artículos, vigentes en los estatutos andaluz y valenciano, fueron descartados en el catalán y, todavía nadie me lo ha explicado.