La gestión de Carlos Mazón frente a la devastadora DANA que asoló la Comunidad Valenciana, dejando más de 200 fallecidos, ha generado una oleada de críticas que no cesan. El último capítulo de esta crisis política ha sido el cese de Nuria Montes, consellera de Innovación, Industria, Comercio y Turismo, tras unas declaraciones que indignaron a familiares de las víctimas y avivaron la tensión en un Consell que se tambalea.
Montes será sustituida por Marián Cano, una figura destacada en el ámbito empresarial valenciano como presidenta de la patronal del calzado (AVECAL). Este movimiento, sin embargo, no ha bastado para calmar los ánimos: Compromís ha propuesto una moción de censura, mientras que desde Vox se tildan de "insuficientes" las explicaciones ofrecidas por Mazón.
Las declaraciones que encendieron la polémica
La destitución de Nuria Montes era un secreto a voces desde que sus palabras durante la gestión de la DANA se viralizaron. Montes pidió a los familiares de las víctimas "esperar noticias en sus casas" en lugar de acudir al recinto habilitado como morgue en Feria Valencia, lo que generó un aluvión de críticas. Su posterior disculpa pública, en la que admitió haberse expresado "mal", no logró mitigar el daño.
A esto se sumó la denuncia de una funcionaria de su conselleria que perdió a su marido y su hija durante la tragedia. Según sus declaraciones, Montes tardó una semana en contactarla y le dijo: "Mujer, habérmelo dicho, te hubiera enviado un coche oficial". Estas palabras, calificadas como insensibles, avivaron aún más las críticas en redes sociales y medios.
¿Suficiente?
La llegada de Marián Cano al gobierno valenciano es vista como un intento de Mazón por reforzar la imagen de su ejecutivo, profundamente cuestionado tras la tragedia. Cano, licenciada en Derecho por la Universidad Complutense y con una destacada trayectoria en el sector del calzado, deberá lidiar con una cartera que arrastra desgaste político y social.
El cese de Montes es solo uno de los movimientos de un gobierno en plena remodelación. Este domingo, Mazón también reforzó el papel de Susana Camarero, nombrándola portavoz del Consell. La vicepresidenta ha defendido las decisiones del presidente, pero las dudas sobre la capacidad del equipo para gestionar la reconstrucción siguen creciendo.
La oposición carga contra Mazón
Desde la oposición, la presión no cesa. Compromís ha propuesto ceder sus 15 diputados al PSOE para impulsar una moción de censura, argumentando que la gestión de Mazón ha sido "negligente". Aunque los socialistas no parecen dispuestos a dar este paso, el planteamiento refleja el desgaste político del presidente.
Por su parte, Vox ha señalado que las explicaciones ofrecidas por Mazón son "insuficientes". "Los errores y negligencias han marcado la gestión de esta catástrofe", aseguró el portavoz nacional del partido, José Antonio Fúster.
Feijóo advierte: "la confianza debe ganarse"
La crisis también ha salpicado al Partido Popular a nivel nacional. Alberto Núñez Feijóo ha pedido a Mazón que recupere la confianza de los ciudadanos. "No podemos permitir que algo así vuelva a ocurrir con las mismas consecuencias", afirmó durante una reunión de la Junta Directiva Nacional del PP.
La presión sobre Mazón no solo viene de la oposición. Dentro de su partido, ya hay voces que cuestionan si el presidente es capaz de liderar la reconstrucción económica y social de una región devastada.
Mientras Mazón intenta recomponer su ejecutivo, la sombra de una moción de censura y las críticas desde su propio partido amenazan con debilitar aún más su liderazgo. La DANA no solo ha dejado un rastro de destrucción en la Comunidad Valenciana, sino que también ha sacudido los cimientos políticos de la Generalitat.
El tiempo dirá si los cambios introducidos por Mazón son suficientes para devolver la confianza a una ciudadanía golpeada por la tragedia. Por ahora, el presidente navega en aguas turbulentas, mientras la oposición y su propio partido observan cada uno de sus movimientos.