El feminismo ha tenido que ser al fin el verdadero acicate para que el PSOE andaluz, otrora bastión infranqueable de los socialistas a nivel nacional, haya empezado a enseñar los colmillos al Gobierno andaluz de Juan Manuel Moreno Bonilla, justo cuando se han cumplido cinco años de la llegada al poder de la derecha en Andalucía. Hasta ahora, la oposición educada, distante y condescendiente del líder socialista andaluz venía siendo uno de los aspectos más criticados por las enflaquecidas corrientes internas desde que Juan Espadas, ex alcalde de Sevilla, asumió el liderazgo de los socialistas andaluces a instancias de Pedro Sánchez en julio de 2021. Pero la impactante y polémica campaña ‘Moreno Bonilla: Yo no te creo’, precisamente en estas fechas previas al 8M, Día Internacional de la Mujer, ha sido la chispa que ha prendido definitivamente la contraofensiva de los socialistas para iniciar de nuevo el asalto al poder en Andalucía, una tierra que han gobernado de forma continuada durante 37 años de autonomía, hasta que en diciembre de 2018 Susana Díaz cosechó su victoria más amarga que permitió la llegada al poder del PP con el peor resultado de su historia.
La reorganización de la ejecutiva socialista andaluza emprendida el pasado enero por su secretario general para conformar un ‘gobierno en la sombra’ con el que ejercer un estrecho marcaje a la gestión de Moreno Bonilla al frente de la Junta comienza a dar sus frutos y el propio Espadas es ya el principal estilete para denunciar el feminismo de boquilla de Moreno Bonilla y su equipo o sus intentos de “colar” por enésima vez su proyecto para legalizar regadíos en el entorno de Doñana, o también la degradación progresiva de la sanidad pública en detrimento de la privada, que la Consejería de Salud pretende que sea el santo que se le aparezca a su consejera Catalina García para aliviar las desbocadas listas de espera quirúrgicas y diagnósticas, sobre las que ya ha anunciado repetidos planes de choque para reducirlas, sin éxito alguno hasta el momento a tenor de los datos oficiales.
Espadas es ya el principal estilete para denunciar el feminismo de apariencias de Moreno Bonilla, los intentos de colar sus planes de legalización de regadíos en Doñana o la apuesta por la sanidad privada en detrimento de la pública
La campaña del “Yo no te creo” iniciada por los socialistas andaluces contra la gestión del Gobierno andaluz ha entrado en tromba en la agenda política de la comunidad y ha opacado el margen de actuación del equipo de Moreno Bonilla hasta el punto de que los suyos han tenido que tirar de victimismo para hacer frente a esta ofensiva. No son pocos los consejeros que se han sentido ofendidos, o directamente “ofendiditos”, como los socialistas han definido esta postura tirando de ironía, por utilizar un lema que hizo suyo en su día el movimiento feminista en general para denunciar la justicia patriarcal sufrida por la joven víctima de los violadores de la Manada de los Sanfermines de 2016, que desembocó en la Ley del Sólo sí es sí, también muy criticada por el PP por la oleada de excarcelaciones y reducciones de condenas de agresores sexuales provocadas por la interpretación de la norma dada por numerosos jueces.
https://x.com/_JuanEspadas/status/1765446795134423392?s=20
El propio Espadas, hasta ahora muy comedido en sus intervenciones públicas para denunciar las políticas del Gobierno andaluz, ha pasado a la ofensiva directamente con un estilo mucho más punzante y directo, que también se puede apreciar en sus mensajes publicados en redes sociales como X, antigua Twitter. Sin ir más lejos, este miércoles, respondió al portavoz parlamentario del PP andaluz, Toni Martín, contraatacando sobre el caso Koldo, en el que está investigado por corrupción el que fuera asesor del ex ministro socialista José Luis Ábalos.
Este cruce de acusaciones ha llegado precisamente en las fechas previas a la celebración del 8M, donde PP y PSOE se culpan mutuamente de no haber facilitado una declaración institucional del Parlamento andaluz con motivo del Día de la Mujer. Desde la bancada popular se ha asegurado que “por primera vez” ha sido imposible llevar a cabo en el Parlamento de Andalucía esta declaración oficial contra la violencia machista y a favor de la lucha por la igualdad. El PSOE recuerda que ha sido precisamente el blanqueamiento que los populares han venido haciendo del negacionismo de Vox el que realmente ha impedido este consenso en materia de igualdad desde que en 2019 el PP comenzó a necesitar los votos del partido ultraderechista. “Escucho a los ‘ofendiditos’ que es la primera vez que el Parlamento andaluz no aprobará una declaración institucional del 8M, es absolutamente falso. Desde que Moreno Bonilla se tiró en brazos de Vox para conseguir la Junta ha sido imposible aprobarla por falta de consenso”, asegura la parlamentaria autonómica socialista Adela Castaño.