La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha mantenido sendas reuniones con Ana García de la Torre secretaria de Salud laboral y Patricia Ruíz Martínez, de UGT, Mariano Sanz Lubeiro, secretario de Salud Laboral y Sostenibilidad Medioambiental y Mari Cruz Vicente Peralta, secretaria de Acción Sindical y Empleo de CCOO para proteger a las trabajadoras del hogar.
También se ha reunido con responsables de los colectivos de trabajadoras de hogar y del servicio de ayuda a domicilio SEDOAC, Territorio Doméstico, SINTRAHOCU, sindicato SAD y de la plataforma unitaria AUXAD para abordar la nueva normativa en materia de prevención de riesgos laborales.
Proteger los derechos de miles de trabajadoras de ayuda a domicilio y del hogar
Según ha explicado Díaz, la nueva “norma fundamental permitirá proteger los derechos de miles de trabajadoras de ayuda a domicilio y del hogar” tal y como mandata la Estrategia de Seguridad y Salud en el Trabajo 2023-2027 acordada en el marco del Diálogo Social con las organizaciones sindicales, empresariales y comunidades autónomas.
Además de los aspectos físicos, la titular de Trabajo también ha puesto en valor que “hay unos riesgos psicosociales añadidos ya que desempeñan su actividad en solitario y en momentos clave de nuestras vidas atendiendo a personas con patologías vinculadas al deterioro no solo físico sino también cognitivo o acompañando a personas cuando les llega el momento de la muerte” ha enfatizado la vicepresidenta segunda.
Objetivos: condiciones de trabajo dignas y sanas
Las personas que realizan actividades de cuidado retribuidas deben tener aseguradas condiciones de trabajo dignas y sanas, con medidas preventivas efectivas, tanto en el ámbito de los riesgos físicos como psicosociales.
Se va a modificar el Real Decreto 486/1997, de 14 de abril, por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud en los lugares de trabajo, para hacer mención expresa a las empresas a cuyo servicio se encuentre el personal dedicado a la actividad de ayuda a domicilio.
La nueva norma también implicará mejoras en la situación en materia de prevención de riesgos laborales de las personas que prestan servicio en ayuda a domicilio, en su mayoría mujeres, a través de la incorporación de la perspectiva de género en la prevención de riesgos laborales, con medidas específicas frente a agentes biológicos, cancerígenos o químicos.
Así con la nueva norma, la evaluación de riesgos contemplará la posibilidad de que cualquier puesto esté ocupado por hombres o por mujeres, teniendo en cuenta la existencia de riesgos psicosociales, particularmente cuando guardan relación con las responsabilidades familiares y de cuidado.