La servidumbre de tránsito no se cumple en la isla de Toralla. Tampoco se cumple la servidumbre de acceso al mar establecida en varios puntos de la costa para garantizar el libre acceso público al mar. Los vecinos de Coruxo y San Miguel de Oia, junto con los ecologistas de Vigo, llevan décadas exigiendo el libre acceso a la isla.
En octubre de 1997, el Tribunal Supremo rechazó el recurso presentado "por estos ricos que se creen dueños de la isla y, por lo tanto, pretenden mantener la exclusividad del uso y disfrute del puente y sus playas", denuncian.
La legislación vigente establece que cualquier persona puede llegar a pie a la orilla del mar. Pero la realidad es que los visitantes sólo pueden acceder a las playas ubicadas a ambos lados del puente. En 2008, parecía que esto se había logrado con el proyecto de un sendero peatonal para acceder a todo el litoral de la isla, impulsado por la ministra de Medio Ambiente, Elena Espinosa, ahora concejala del ayuntamiento. "Pero por razones que escapan a quienes no tenemos recursos, el proyecto se frustró y no se llevó a cabo", explican.
Entre 2014 y 2024, volvieron a impulsar esta demanda local con una acción sobre el acceso a la isla. Un grupo de vecinos de las parroquias viguesas de Coruxo y San Miguel de Oia, junto con activistas de Ecologistas en Acción, Greenpeace y Amigas da Terra, bloquearon la entrada a la isla y, frente a la puerta de control de acceso, leyeron un manifiesto exigiendo a los vigueses "la devolución de lo que les pertenece". Llegaron a desplegar una pancarta gigante en la playa de la costa de la isla instando a los vigueses a reconquistar Toralla.
En octubre del año pasado, tras una nueva acción de protesta sobre esta usurpación del espacio público en Praia do Vao, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico anunció "la implementación de una acción para recuperar el libre acceso a la costa". Pero de aquella promesa del Gobierno, nada de nada. Vecinos y ambientalistas continúan realizando acciones de concienciación y visibilidad "hasta que la acción del Ministerio se haga realidad", señalan.
Mientras, esperan que esta vez Vigo logre reconquistar la isla usurpada por los ricos. Una victoria para el vecindario y el ecologismo vigués.