Nunca ha habido tantos periodistas encarcelados como en 2021, según el informe anual de la organización Reporteros sin Fronteras (RSF), que cuenta con cerca de 500 profesionales detenidos en todo el mundo por su labor. Por otro lado, el número de periodistas asesinados se ha reducido este año.
En total hay 488 periodistas tras las rejas en el momento de la publicación del informe RSF, que hace balance de los ataques y amenazas a la profesión. Es el número más alto desde 1995, cuando el organismo internacional comenzó a publicar estos estudios, y representa un aumento del 20% con respecto al año anterior.
El elevado número de periodistas encarcelados “es el resultado de tres regímenes dictatoriales”, observa en un comunicado el secretario general de RSF, Christophe Deloire. Se trata del caso de Birmania, donde una junta militar tomó el poder en febrero y desde entonces ha reprimido violentamente las protestas de la oposición; Bielorrusia, donde el dictador Alexander Lukashenko ha intensificado la persecución de opositores y periodistas, habiendo capturado al periodista Roman Protasevich en mayo al secuestrar un avión; y en China, donde se menciona específicamente la ofensiva del régimen contra la autonomía y los derechos y libertades de Hong Kong.
La detención arbitraria de periodistas, dice Deloire, es "un reflejo del fortalecimiento de las dictaduras en el mundo, de una acumulación de crisis y de la falta de escrúpulos de estos regímenes". “También podría ser el resultado de nuevas luchas de poder geopolítico, donde los regímenes autoritarios no están bajo suficiente presión para limitar la represión”, agrega.
Entre los 488 periodistas encarcelados en todo el mundo, hay 60 mujeres, la cifra más alta registrada. Entre ellas se encuentra una de las ganadoras del premio RSF de este año, la china Zhang Zhan, una de las primeras periodistas independientes en cubrir las primeras etapas de la pandemia covid-19 en Wuhan a principios de 2020.Zhang Zhan fue arrestada en mayo por "causar disturbios" .
China ostenta el título de “mayor prisión de periodistas”del planeta, por quinto año consecutivo, con 127 profesionales encarcelados actualmente.Birmania, con 53, seguida de Vietnam, con 43, Bielorrusia, con 32, y Arabia Saudita, con 31.Por otro lado, el número de periodistas asesinados descendió y, por primera vez desde 2003, se ubicó por debajo de 50.
Durante 2021, 46 periodistas murieron por su trabajo, y México, con siete, y Afganistán, con seis, fueron una vez más los países más peligrosos.Para RSF, la caída en el número de periodistas asesinados se debe a la reducción de la intensidad de conflictos como las guerras en Siria, Irak y Yemen, y también a una creciente movilización en defensa de la libertad de prensa.Aun así, enfatiza la organización, una media de un periodista fue asesinado cada semana a lo largo del año por el ejercicio de su profesión.
Entre los casos de asesinatos de periodistas, RSF destaca algunos ocurridos en países de la Unión Europea, donde la libertad de prensa es considerada un pilar fundamental, que tuvo el año más mortífero desde 2015, marcado por el atentado a la redacción de Charlie Hebdo.En 2021 fueron asesinados el periodista griego Giorgios Karaivaz, que realizaba una investigación por corrupción policial, y el holandés Peter de Vries, especialista en crimen organizado.