La Comisión está tomando medidas para abordar los riesgos derivados de las importaciones de bajo valor vendidas a través de minoristas en línea no pertenecientes a la UE y mercados que albergan a comerciantes no pertenecientes a la UE.
Estas medidas forman parte de la Comunicación sobre comercio electrónico «Un conjunto de herramientas completo de la UE para un comercio electrónico seguro y sostenible», que la Comisión propone hoy. La Comisión fomenta la adopción de medidas, entre otras, en los ámbitos de las aduanas y el comercio, como la puesta en marcha de controles aduaneros, la protección de los consumidores y las leyes de servicios digitales y mercados digitales.
En 2024, entraron en el mercado de la UE alrededor de 4.600 millones de envíos de bajo valor (de 150 euros o menos): 12 millones de paquetes diarios, el doble que el año anterior. Muchos de estos productos no cumplían la legislación de la UE, lo que suscitó preocupación por la posibilidad de que entraran en la UE productos nocivos, la competencia desleal para los vendedores de la UE que cumplen las normas y el impacto medioambiental de los envíos masivos.
Acciones que propone la Comisión Europea
La Comisión ha propuesto, como acciones en su conjunto de herramientas para un comercio electrónico seguro y sostenible,la reforma aduanera, por la que se insta a la rápida adopción de la reforma de la unión aduanera y se propone eliminar la exención de derechos para los paquetes de bajo valor, a fin de permitir la rápida implementación de nuevas normas para nivelar el campo de juego; medidas de refuerzo para las mercancías importadas con la puesta en marcha de controles coordinados entre las autoridades aduaneras y de vigilancia del mercado y acciones coordinadas en materia de seguridad de los productos; protección de los consumidores en los mercados en línea mediante la aplicación de la Ley de Servicios Digitales, la Ley de Mercados Digitales, el Reglamento General de Seguridad de los Productos y el Reglamento de Cooperación en materia de Protección del Consumidor; uso de herramientas digitales y supervisión del panorama del comercio electrónico a través del Pasaporte Digital de Productos y nuevas herramientas de IA; mejora de las medidas medioambientales con la adopción de un plan de acción sobre el Reglamento de diseño ecológico para productos sostenibles y apoyo a las modificaciones de la Directiva marco sobre residuos; sensibilización para informar a los consumidores y comerciantes sobre sus derechos y riesgos, y el fomento de la cooperación y el comercio internacionales con la formación de socios no pertenecientes a la UE sobre la seguridad de los productos de la UE y lucha contra el dumping y las subvenciones.
La Comisión ha hecho un llamamiento a los países de la UE, a los colegisladores y a las partes interesadas para que colaboren y apliquen estas medidas. En el plazo de un año, la Comisión evaluará la eficacia de estas acciones y podrá proponer medidas adicionales en caso necesario.
Alrededor del 70 % de los europeos compran regularmente en línea, incluso en plataformas de comercio electrónico de fuera de la UE. Si bien el comercio electrónico aporta muchos beneficios a los consumidores, las empresas y la economía de la UE, también presenta ciertos desafíos. La nueva iniciativa tiene como objetivo equilibrar la protección del consumidor, la competencia leal y la sostenibilidad, al tiempo que fomenta un mercado de comercio electrónico seguro y de alta calidad en la UE.