La élite política y empresarial mundial, presente en Davos, ha escuchado el contundente mensaje del Secretario General de la ONU, António Guterres, quien ha denunciado la falta de colaboración multilateral en un “un mundo cada vez más a la deriva”, amenazado por dos peligros existenciales: el cambio climático y la inteligencia artificial (IA) no regulada.
Guterres se ha referido al tema de la reunión de este año, Colaboración para la era de la inteligencia, afirmando que precisamente apenas hay pruebas de colaboración o inteligencia, pero sí abundantes del empeoramiento de muchos de los problemas del mundo, desde los conflictos a la desigualdad y las violaciones de los derechos humanos.
La guerra nuclear ya no es la única amenaza existencial para la humanidad, ha afirmado, señalando la crisis climática y la “expansión sin control” de la inteligencia artificial.
El monstruo de Frankenstein
Comparando la adicción a los combustibles fósiles con el monstruo de Frankenstein, “que no perdonaba nada ni a nadie”, el Secretario General ha señalado la ironía que supone el hecho de que 13 de los mayores puertos del mundo para superpetroleros estén a punto de verse desbordados por la subida del nivel del mar, debido al aumento de las temperaturas provocada por esos mismos combustibles.
La decisión de varias instituciones financieras e industrias de dar marcha atrás en sus compromisos climáticos ha sido calificada por Guterres como “corta de miras y, paradójicamente, egoísta, a la vez que contraproducente”.
Estar en el lado equivocado
“Están en el lado equivocado de la historia. Están en el lado equivocado de la ciencia. Y están en el lado equivocado de los consumidores que buscan más sostenibilidad, no menos”, ha asegurado.
De cara a la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Clima (COP30), que se celebrará en Brasil a finales de año, el Secretario General ha trecordado a los líderes mundiales que deben cumplir su promesa de elaborar nuevos planes nacionales de acción por el clima para toda la economía mucho antes de la cita.
Los países en desarrollo necesitan un “auge de financiación” para la acción climática, ha declarado, instando no sólo a los gobiernos sino a todas las empresas e instituciones financieras a crear planes de transición sólidos y responsables.
La IA, un arma de doble filo
La próxima amenaza existencial, la inteligencia artificial, es un arma de doble filo, ha explicado Guterres, debido a que ya está revolucionando el aprendizaje, diagnosticando enfermedades, ayudando a los agricultores a aumentar sus cosechas y mejorando la orientación de la ayuda. Sin embargo, "si se deja sin gobernar, conlleva profundos riesgos. Puede perturbar las economías, socavar la confianza en las instituciones y agravar las desigualdades", ha advertido el Secretario General.
El Pacto Mundial Digital, que forma parte del Pacto para el Futuro adoptado por los Estados miembros de la ONU el pasado septiembre, ofrece una “ruta para aprovechar el inmenso potencial de la tecnología digital y cerrar las brechas digitales”, con una visión compartida de la IA al servicio de la humanidad, y no al revés.
A pesar de los desafíos, Guterres ha afirmado que la ONU "nunca cesará su demanda por la paz, basada en la Carta de las Naciones Unidas, el derecho internacional y los principios de soberanía. Así como la independencia política e integridad territorial de los Estados".
Reformar las instituciones, desde la arquitectura financiera mundial hasta el Consejo de Seguridad de la ONU, es una necesidad, ha afirmado el Secretario General, porque los sistemas de gobernanza suelen estar mal equipados para hacer frente a los retos actuales. Pero estos cambios esenciales, a los que se comprometieron los líderes mundiales en la Cumbre del Futuro, sólo serán posibles con voluntad política.