La sede de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) se convirtió el pasado 24 de enero en un espacio de denuncia y solidaridad. Allí, Nasser Abu Baker, presidente del Sindicato de Periodistas Palestinos (PSJ) y vicepresidente de la Federación Internacional de Periodistas (FIP), trasladó la estremecedora realidad que vive la profesión en Palestina. Desde el inicio del conflicto en octubre de 2023, más de 200 periodistas han sido asesinados, 400 heridos, y otros 160 han sido arrestados. Además, decenas de sedes mediáticas han sido arrasadas, incluidas 20 emisoras de radio locales.
"El periodismo en el punto de mira: más de 200 periodistas asesinados en Palestina desde octubre"
Abu Baker subrayó con contundencia que estos ataques no son fortuitos: “Se ha intentado asesinar la verdad y han matado a sus testigos”. Su mensaje fue claro: el periodismo se ha convertido en un objetivo directo en la región, y la falta de acceso para la prensa extranjera a la Franja de Gaza no hace más que reforzar esta censura.
Un mensaje de alarma
El líder del PSJ explicó que más de 4.000 periodistas, en su mayoría europeos, han intentado entrar en Gaza para documentar lo que ocurre. Sin embargo, las restricciones impuestas por Israel lo han hecho imposible. “Esperamos que todas las fuerzas y organismos denuncien la no presencia de prensa extranjera en nuestros territorios”, añadió Abu Baker, destacando que esta ausencia de cobertura internacional agrava la desinformación y el desconocimiento global sobre la magnitud de la crisis.
Además de exigir acceso y transparencia, el presidente del PSJ hizo un llamado a la comunidad internacional para garantizar la protección de los periodistas en zonas de conflicto. “Después de esta gran masacre, necesitamos más protección internacional como periodistas palestinos (…) Necesitamos también ese apoyo emocional y solidario a nuestros colegas en Palestina, algo que les ha ayudado y está ayudando a resistir frente a los ataques”, afirmó.
Solidaridad desde España
El encuentro contó con la participación de Miguel Ángel Noceda, presidente de la FAPE; Agustín Yanel, secretario general de la Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP); y Agustín Millán, en representación de la Agrupación de Periodistas de UGT. Los representantes de las asociaciones españolas reiteraron su condena a los ataques contra la libertad de prensa y respaldaron las denuncias de Abu Baker.
En un comunicado conjunto, las organizaciones españolas subrayaron la importancia de defender un periodismo libre y objetivo, respetando los códigos éticos de la profesión. “Coincidimos en la defensa de la libertad de prensa y el ejercicio de un periodismo libre y objetivo”, declararon.
Este respaldo no solo tiene un componente simbólico, sino que también busca movilizar a otros actores internacionales para que se unan a la denuncia. La solidaridad expresada por FAPE, FeSP y UGT se suma a los múltiples comunicados que han emitido desde el inicio del conflicto, reafirmando su compromiso con los derechos humanos y la libertad de información.
Censura y violencia: un arma contra la verdad
Las cifras presentadas por Abu Baker son desoladoras. La violencia contra los periodistas palestinos no solo busca silenciar sus voces, sino que también envía un mensaje intimidante a quienes intenten informar desde la región. En total, 133 sedes y entidades periodísticas han sido destruidas, borrando del mapa espacios que no solo eran lugares de trabajo, sino también símbolos de resistencia.
“La masacre no solo es física, es también informativa. Sin testigos, no hay verdad, y sin verdad, no hay justicia”, enfatizó Abu Baker. Esta estrategia de acallar a los medios tiene consecuencias devastadoras, no solo para la población palestina, sino para la comunidad internacional, que queda privada de información veraz y objetiva sobre el conflicto.
Protección para los periodistas palestinos
El mensaje del presidente del PSJ no es solo una denuncia, sino también una llamada a la acción. Desde la protección de los periodistas hasta el acceso libre de la prensa extranjera, las demandas presentadas buscan salvaguardar un derecho fundamental: el de estar informado.
Las asociaciones españolas, por su parte, han reafirmado su compromiso con la lucha por la libertad de prensa. El encuentro entre Nasser Abu Baker y los representantes de FAPE, FeSP y UGT no solo ha servido para poner el foco en la difícil situación de los periodistas palestinos, sino también para recordar que la solidaridad y el apoyo internacional son herramientas esenciales en la defensa de los derechos fundamentales.
En un contexto donde las noticias falsas y la desinformación son armas de guerra, garantizar el acceso a información veraz y proteger a quienes la producen es más urgente que nunca. La lucha de los periodistas palestinos no es solo suya, sino de todos los que creen en la libertad de prensa como pilar de las democracias.