En el panorama económico de España, los megaproyectos relacionados con baterías para vehículos eléctricos se han convertido en un punto de referencia clave. Sin embargo, hay cierta polémica, en realidad absurda, en torno a quién debería recibir el mérito por estos logros. Aunque el Partido Popular (PP), en su dirección en distintas comunidades autónomas, ha mostrado una tendencia a atribuirse logros de tales inversiones, el papel protagonista en las negociaciones y financiaciones ha provenido del gobierno central.
Un ejemplo palpable es la interacción con Microsoft en la Comunidad de Madrid. A pesar de que fue el gobierno central, dirigido por Pedro Sánchez, el principal mediador en las conversaciones con el gigante tecnológico, la presidenta regional Isabel Díaz Ayuso se posicionó en el foco, intentando atribuir dicho logro a su gestión.
Esta dinámica se refleja nuevamente en el escenario de las inversiones en el sector de baterías automotrices. Con grupos como Ford y Volkswagen planificando la instalación de grandes plantas en territorio español, figuras como Mazón, también del PP, buscan capitalizar políticamente estos avances.
Inversiones y apoyo del Gobierno central
El compromiso del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo con la evolución del sector automotriz eléctrico en España es evidente. Las dos resoluciones definitivas emitidas dentro del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica del Vehículo Eléctrico y Conectado (Perte VEC) son prueba de ello, beneficiando directamente a empresas como Ford y Basquevolt con inversiones sustanciales.
Ford, con su visión de futuro en Almussafes, Valencia, busca establecer una planta líder en el ensamblaje de baterías para vehículos eléctricos y, Basquevolt, por otro lado, tiene planes para una planta de fabricación de celdas de batería de estado sólido en Vitoria-Gasteiz, un proyecto tecnológicamente avanzado y con gran potencial.
Ambas propuestas, y otras más en el horizonte, representan una transformación en el sector automotriz español y reafirman el compromiso del gobierno central en fomentar el desarrollo y la innovación en el país.
A medida que España avanza en este sector esencial, es necesario que los reconocimientos y méritos se asignen con precisión y justicia, asegurando que aquellos que realmente lideran y facilitan estos avances reciban el crédito que merecen.
Pero no se dan cuenta de que nadie ( por ahora ) quiere coches a pilas.
Un coche a pilas es como un carro tirado por vacas.