Según un nuevo informe de la Organización Mundial de la Salud, muchas personas con discapacidad corren un mayor riesgo de muerte prematura y enfermedad que el resto de la sociedad.
El Informe mundial sobre la equidad sanitaria para las personas con discapacidad muestra que, debido a las desigualdades sanitarias sistémicas y persistentes, muchas personas con discapacidad corren el riesgo de morir mucho antes -hasta 20 años antes- que las personas sin discapacidad.
También son más propensos a desarrollar enfermedades crónicas, con hasta el doble de riesgo de asma, depresión, diabetes, obesidad, enfermedades bucodentales y derrames cerebrales. Sin embargo, muchas de las diferencias en los resultados sanitarios no pueden explicarse por la enfermedad o la discapacidad subyacente, sino por factores evitables, injustos y poco equitativos.
Presentado antes del Día Internacional de las Personas con Discapacidad, el informe muestra que 1.300 millones de personas en todo el mundo viven actualmente con una discapacidad importante (1 de cada 6). Esta cifra subraya la importancia de garantizar que las personas con discapacidad participen plena y efectivamente en todos los aspectos de la sociedad y de incorporar los principios de inclusión, accesibilidad y no discriminación en el sector sanitario.
Factores injustos: una de las principales causas de las disparidades sanitarias
El informe subraya la necesidad de actuar con rapidez para hacer frente a las enormes desigualdades sanitarias causadas por factores injustos e inequitativos dentro de los sistemas sanitarios. Estos factores, que explican en gran medida las diferencias en los resultados sanitarios entre las personas con y sin discapacidad, pueden adoptar varias formas:
Actitudes negativas de los proveedores de atención sanitaria. Información sanitaria presentada de forma incomprensible. Y dificultades para acceder a un centro de salud debido al entorno físico, la falta de transporte o las barreras financieras.
"Los sistemas sanitarios deben abordar los retos a los que se enfrentan las personas con discapacidad, no añadirlos", ha dicho el Director General de la OMS, Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus. "Este informe pone de manifiesto las desigualdades a las que se enfrentan las personas con discapacidad cuando intentan acceder a la atención que necesitan. La OMS se ha comprometido a apoyar a los países con la orientación y las herramientas que necesitan para garantizar que todas las personas con discapacidad tengan acceso a servicios sanitarios de calidad."
Alrededor del 80% de las personas con discapacidades viven en países de ingresos bajos y medios, donde los servicios sanitarios son limitados, por lo que abordar las desigualdades en materia de salud puede resultar difícil. Sin embargo, incluso con recursos limitados, se puede hacer mucho.
Perspectivas para un sector sanitario que incluya la discapacidad
Partiendo de la premisa de que todas las personas tienen el mismo derecho al más alto nivel posible de salud, el informe ofrece un importante análisis económico de la adopción de un enfoque integrador de la discapacidad. Sostiene que es rentable invertir en un sector sanitario que incluya la discapacidad.
Según los cálculos de la OMS, los gobiernos podrían esperar un retorno de unos 10 dólares por cada dólar invertido en la prevención y gestión de enfermedades no transmisibles que tengan en cuenta la discapacidad. Además, la planificación familiar y la inmunización son rentables cuando se aplican teniendo en cuenta la discapacidad.
Acción específica y global en todo el sector sanitario
El informe describe 40 medidas que los gobiernos deberían adoptar en el sector sanitario, basándose en los últimos datos procedentes de estudios académicos y consultas con los países y la sociedad civil, incluidas las organizaciones que representan a las personas con discapacidad. Estas medidas varían en cuanto a los recursos necesarios y van desde la mejora de las infraestructuras físicas hasta la formación del personal sanitario y de atención personal.
Garantizar la equidad sanitaria para las personas con discapacidad
Garantizar la equidad sanitaria para las personas con discapacidad también tendrá beneficios más amplios y puede hacer avanzar las prioridades sanitarias mundiales de tres maneras:
La equidad sanitaria para todos es esencial para lograr la cobertura sanitaria universal. Las intervenciones de salud pública inclusivas que se administran de forma equitativa a los diferentes sectores de la sociedad pueden contribuir a la salud de las poblaciones. Y la promoción de la equidad sanitaria para las personas con discapacidad es fundamental en todos los esfuerzos por proteger a todos en las emergencias sanitarias.
Abordar las desigualdades sanitarias
“Abordar las desigualdades sanitarias de las personas con discapacidades beneficia a todos”, dijo la Dra. Bente Mikkelsen, Directora del Departamento de Salud Pública de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Abordar las desigualdades sanitarias de las personas con discapacidades beneficia a todos", dijo la Dra. Bente Mikkelsen, Directora del Departamento de Enfermedades No Transmisibles de la OMS. “Las personas mayores, las personas con enfermedades no transmisibles, los inmigrantes y los refugiados, u otras poblaciones a menudo olvidadas por los servicios, pueden beneficiarse de enfoques que se centran en las dificultades persistentes que se encuentran al abordar la discapacidad en el sector sanitario.”
Y añadió: “Instamos a los gobiernos, a los socios sanitarios y a la sociedad civil a que garanticen que todas las acciones del sector sanitario incluyan a las personas con discapacidad para que puedan disfrutar de su derecho al más alto nivel posible de salud”.
La OMS está colaborando con los Estados Miembros, los asociados mundiales y las partes interesadas en la salud y la discapacidad, incluidas las organizaciones representativas de las personas con discapacidad, para traducir las recomendaciones de este informe en medidas concretas en los países. Esto incluye la elaboración de una Guía de Acción sobre la Integración de la Discapacidad en el Sector Sanitario, que es una herramienta de planificación estratégica nacional para ayudar a los países a realizar los cambios necesarios para lograr la equidad para las personas con discapacidad.