La XXVII Conferencia de Presidentes, celebrada en el Palacio de la Magdalena de Santander, ha reunido este viernes a Pedro Sánchez y los líderes autonómicos tras casi tres años desde la última cumbre. Con un contexto marcado por los desacuerdos entre el Gobierno central y las comunidades gobernadas por el Partido Popular, los temas prioritarios incluyen la reforma del sistema de financiación autonómica, el reparto de menores migrantes no acompañados y la vivienda.
Propuestas del Gobierno: quitar deuda y avanzar en la financiación
Uno de los puntos más relevantes planteados por el Ejecutivo ha sido la convocatoria en enero de un Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) para negociar una quita de deuda a las autonomías del régimen común. Actualmente, las comunidades deben 208.638 millones de euros al Estado, según datos del Banco de España. Aunque el Gobierno no ha detallado el porcentaje de deuda a condonar, ha defendido esta medida como un paso necesario para equilibrar las finanzas autonómicas.
Pedro Sánchez ha insistido en la necesidad de "un nuevo modelo de financiación autonómica que blinde la solidaridad entre territorios". Esta propuesta incluye la posibilidad de reprogramar fondos europeos para apoyar a regiones afectadas por desastres como la DANA, algo que ha encontrado apoyo parcial entre las comunidades, aunque genera recelos entre los barones del PP.
La vivienda, un punto de choque
La emergencia habitacional también ha ocupado un lugar destacado en la agenda. El Gobierno ha pedido a las comunidades del PP que utilicen las herramientas de la Ley de Vivienda para contener los precios del alquiler, una medida que ha sido rechazada por algunos líderes populares, quienes argumentan que esta legislación no resuelve los problemas estructurales del mercado.
El presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, ha respaldado la creación de una empresa pública de vivienda, pero ha criticado las medidas estatales, afirmando que "no facilitan el acceso a vivienda asequible". Por su parte, Juanma Moreno, presidente de la Junta de Andalucía, ha planteado incentivos fiscales y una reforma de la Ley del Suelo como alternativas.
Migración: solidaridad entre comunidades
Uno de los debates más tensos ha girado en torno al reparto de menores migrantes no acompañados. El Gobierno ha instado a las comunidades a alcanzar "una solución compartida basada en criterios objetivos y solidarios". El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, y el lehendakari, Iñigo Urkullu, han liderado una propuesta conjunta para una distribución extraordinaria de menores, una medida que cuenta con el respaldo del ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres.
Sin embargo, el PP ha mostrado reticencias a modificar la ley de extranjería, lo que dificulta un consenso. Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, ha insistido en que "la falta de recursos" impide asumir nuevas responsabilidades sin un apoyo económico extraordinario por parte del Estado.
La tensión política marca la cumbre
El saludo fugaz entre Pedro Sánchez e Isabel Díaz Ayuso ha simbolizado las tensiones políticas que atraviesan esta cumbre. Ayuso, que no participó en las rondas de contacto previas organizadas por el presidente del Gobierno, ha mantenido una postura crítica frente a las propuestas del Ejecutivo. Por su parte, Sánchez ha destacado la importancia del diálogo y la colaboración, señalando que "los españoles esperan que hablemos, que negociemos y que pongamos el interés general por delante".
Apuestas por la sanidad
En el terreno sanitario, el Gobierno ha anunciado una inversión extraordinaria de 223 millones de euros para financiar soluciones basadas en Inteligencia Artificial que mejoren la atención a los pacientes. Además, se compromete a aumentar las plazas universitarias para profesiones sanitarias, siempre que las comunidades contribuyan a su cofinanciación.
Este punto ha generado consenso entre varias comunidades, aunque algunos líderes han cuestionado cómo se implementará este plan de forma efectiva. Salvador Illa, presidente de la Generalitat de Cataluña, ha defendido la necesidad de una financiación sanitaria equitativa, mientras que Juanma Moreno ha reclamado un fondo transitorio para las regiones "infrafinanciadas".
Un balance desigual
La Conferencia de Presidentes ha servido para visibilizar los retos comunes y las diferencias que dividen a los gobiernos autonómicos y al Ejecutivo central. Aunque la cita ha permitido avanzar en algunos puntos, como la sanidad, los desacuerdos sobre vivienda y financiación autonómica continúan siendo un obstáculo importante. En palabras de la presidenta anfitriona, María José Sáenz de Buruaga: "Debemos ser capaces de poner el interés general por encima de cualquier otra consideración."
Mientras tanto, Pedro Sánchez ha reafirmado su compromiso con un modelo de estado autonómico basado en la cooperación. Sin embargo, las tensiones políticas y la falta de consensos claros reflejan un panorama complejo que seguirá marcando el debate público en los próximos meses.