«Si lo integras en tu cuerpo, lo integras en tu vida». Esta es una de las frases con las que nos recibe el proyecto del Gimasio del Alma, desarrollado por dos profesionales de la danza y la salud, Ana Carrera, experta en Pedagogía en movimiento y danza para el autoconocimiento y sanación personal y Azul Ochoa, terapeuta especializada en anatomía energética y transformación en movimiento a las que hemos llegado siguiendo el Fil D’Ariadna.
Conocer nuestro cuerpo, cuidarlo, moverlo y aportarle lo que necesita es fundamental para sentirnos bien, para mantenernos en un estado óptimo de salud, tanto física como mental. El estrés cotidiano, el exceso de uso de medios de transporte, la vida sedentaria que nos invita a hacer todo sentados, conlleva que nuestro cuerpo vaya acumulando tensión, malas posturas y pierda el ritmo.
Pasear, hacer deporte suave y constante, es una necesidad diaria para nuestro organismo. Pero muchas veces, el ejercicio da pereza. La fuerza de voluntad para ir a un gimnasio, y no trabajar el cuerpo desde la conciencia, puede hacer que los resultados no sean siempre óptimos.
La danza, el movimiento, el análisis de los mensajes que nos envía nuestro cuerpo puede ser un aprendizaje necesario. Y precisamente de todo ello se encargan en el Gimnasio del Alma: liberar tensiones, conocernos mejor, cuidarnos, comprender a nuestro cuerpo y los mensajes que nos da a través de la tensión, del dolor, o incluso de la falta de agilidad. Ponerse en danza como sanación es una propuesta atractiva para quienes el cuidado del cuerpo se integra dentro del bienestar general, también del espiritual y anímico.
Hablamos con Ana Carrera sobre todo ello. Pulsa aquí para conocer en detalle el proyecto.
