A pocos días del Primero de Mayo, las secretarias generales de UGT Madrid y CCOO Madrid, Susana Huertas y Paloma López, han ofrecido una rueda de prensa conjunta donde han cargado con dureza contra las políticas del Gobierno regional de Isabel Díaz Ayuso, al que acusan de deteriorar el bienestar social mientras proclama una falsa libertad. Ambas líderes sindicales han llamado a una masiva movilización para defender “lo conquistado” y “ganar nuevos derechos” en un contexto marcado por el crecimiento de la desigualdad, la precariedad laboral y el debilitamiento de lo público.
“Nos cuesta cada vez más vivir en Madrid”
La secretaria general de UGT Madrid, Susana Huertas, abrió la comparecencia recordando que la manifestación del Primero de Mayo arrancará a las 12:00 en la Gran Vía con esquina en la calle Alcalá y terminará en Plaza de España. Con un tono directo, denunció que “nos hablan de que somos libres por vivir en Madrid, pero la verdad es que lo que nos están quitando son derechos, y sin derechos no hay libertad”.

Huertas se centró en la pérdida de poder adquisitivo de las familias madrileñas. “Cada vez cuesta más hacer la compra, pagar los suministros básicos… Estamos empobreciéndonos día a día”, alertó. Y vinculó esta pérdida de calidad de vida a un modelo que favorece la privatización, especialmente en la sanidad: “La gente no consigue cita, muchos ni siquiera tienen médico asignado. Las pruebas diagnósticas tardan demasiado. ¿Y qué pasa? Que el que puede, se va a un seguro privado. Y no todo el mundo puede permitirse ese gasto”, lamentó.
La dirigente de UGT también denunció el mal estado del llamado Plan Vive para jóvenes. “Nos hemos levantado hoy con noticias de alquileres desorbitados, viviendas sin luz ni agua, sin calefacción, con goteras… Todo eso gestionado por entidades privadas, en un plan supuestamente para ayudar a los jóvenes. Es una tomadura de pelo”.
Según Huertas, esta situación impide la emancipación juvenil: “El 25% de los jóvenes madrileños están en las condiciones laborales más precarias. Se emancipan de media a los 36 años, y eso si logran irse a vivir lejos y asumir trayectos diarios de hasta dos horas para llegar a sus trabajos. ¿Eso es libertad?”.
También puso el foco en la salud laboral: “En lo que va de año ya han muerto 25 personas en accidentes laborales en la región. El año pasado fueron 85. Aunque tengamos un índice de siniestralidad más bajo, eso no significa que no sea grave”. Y añadió que Madrid “no declara enfermedades profesionales y la salud mental no está recogida en las leyes de prevención”. Para Huertas, trabajar jornadas largas y sufrir desplazamientos interminables “afecta directamente a nuestra salud”.

Por ello, reivindicó la jornada de 37,5 horas: “No se trata solo de descansar más, sino de vivir mejor. De mejorar la salud física y mental. De tener derecho a una vida digna en esta Comunidad”.
“La Comunidad más rica es la más desigual”
Por su parte, Paloma López, secretaria general de CCOO Madrid, denunció que el 1 de Mayo llega en un contexto global donde “la extrema derecha está cambiando las reglas del juego”, señalando alianzas internacionales que también, según dijo, “han echado raíces en la Comunidad de Madrid”.
López fue muy crítica con la gestión del Ejecutivo autonómico: “Tenemos una Comunidad Autónoma rica, la que más PIB genera, pero también la que tiene mayores desequilibrios territoriales y sociales”. Según explicó, “una persona que vive en Parla tiene dos años menos de esperanza de vida que alguien de Pozuelo. Esa desigualdad territorial es producto de la falta de servicios públicos en el sur”.
Insistió en que el Gobierno de Ayuso actúa con una “agenda privatizadora” que afecta a la sanidad, la educación y las universidades públicas. “La proliferación de universidades privadas no es casualidad. Se instalan donde los gobiernos del PP recortan y maltratan a las públicas. En lugar de ser un ascensor social, la universidad pública en Madrid ha dejado de ser una herramienta para la movilidad de la clase trabajadora”, denunció.
La brecha salarial y la precariedad femenina
López también abordó una de las prioridades del sindicalismo de clase: la brecha salarial de género. Según CCOO, en España el salario medio anual de las mujeres debería incrementarse en un 32% para igualarse al de los hombres. “La brecha salarial se ha ido acentuando a lo largo de la crisis”, advirtió López, quien denunció que “una sociedad democrática no puede permitirse tener al 50% de su población en peores condiciones laborales”.
Para CCOO, las jornadas a tiempo parcial impuestas a las mujeres bajo el pretexto de la conciliación perpetúan las desigualdades. “Los sectores feminizados están peor pagados, y se penaliza el desarrollo profesional femenino. Esto hay que cambiarlo desde la negociación colectiva y las políticas públicas”.
Un Primero de Mayo con mensaje claro
Ambas líderes sindicales coincidieron en subrayar que la manifestación de este año será “profundamente ideológica” y una “respuesta colectiva” al avance de políticas que están desmontando el estado del bienestar.
“Tenemos que proteger lo conquistado y salir a las calles a reclamar lo que aún no hemos logrado”, resumió Huertas. López concluyó con un mensaje directo: “Reivindicamos una Europa más justa, una Comunidad de Madrid más cohesionada y un modelo de sociedad que ponga en el centro a las personas, no al mercado”.
UGT y CCOO de Madrid llaman así a movilizarse este 1 de mayo por una jornada laboral más humana, una sanidad y educación públicas de calidad, salarios dignos, vivienda accesible y una verdadera igualdad de derechos. Porque como subrayó Susana Huertas: “Tenemos derecho a tener derechos”.