La Inspección de Trabajo requirió -la semana pasada- al Hospital Clínica La Luz del Grupo Quirón Salud que, en el plazo de una semana, adoptara las medidas obligatorias para que una trabajadora, embarazada de casi 5 meses, dejara de realizar trabajos que están prohibidos en el informe de vigilancia de la salud. El órgano inspector reclamó que el cambio de puesto de la profesional se hiciera sin la modificación sustancial de las condiciones de trabajo contractuales.La trabajadora no ha sido retirada del puesto de riesgo y continúa realizando sus tareas, expuesta a agentes químicos y sustancias anestésicas.
El requerimiento del máximo órgano de vigilancia de la salud laboral en la Comunidad de Madrid se produjo tras la denuncia -el pasado 21 de febrero- de CCOO Sanidad Madrid. El origen de la acusación ha sido el último caso protagonizado por el hospital privado del Grupo Quirónsalud. "La empresa que gestiona la Clínica La Luz de Madrid forzaba a una mujer embarazada, de 18 semanas, a realizar tareas prohibidas, no exentas de riesgo para ella y para el feto".
El sindicato denunció la situación de riesgo, de la que ya existían precedentes con otras mujeres trabajadoras en el mismo centro, y solicitó la presencia inmediata de la Inspección de Trabajo que giró una visita al centro en la última semana de febrero. La inspección apreció infracción en materia de prevención de riesgos laborales y el mismo día cursó requerimiento.
En base a lo establecido por la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, el requerimiento señala que se realice la evaluación específica del puesto de trabajo de la citada trabajadora por el riesgo en su primer embarazo y que se determine cada uno de los peligros a los que está expuesta. Añade que se establezca ya, la semana a partir de la cual la trabajadora no podrá realizar su trabajo, y que si no hay ningún puesto alternativo sin riesgo, que se tramite su baja por riesgo de embarazo. También, añade, que hasta que se realice la evaluación específica requerida la empresa tiene que adoptar medidas para evitar que la trabajadora realice trabajos que están prohibidos en el informe de vigilancia de la salud que se instruyó en diciembre de 2024.
Según CCOO, la Clínica La Luz ha recibido con anterioridad requerimientos de la inspección "por la alta carga que soportan los y las profesionales, la deficiente organización del trabajo, lo que conlleva altos riesgos psicosociales".
Proteger a las mujeres embarazadas
Las secretarías de Salud Laboral y de Mujer, Igualdad y Diversidad de CCOO Sanidad Madrid señalan que es fundamental proteger la seguridad y salud de las mujeres embarazadas. Las condiciones de trabajo son una responsabilidad empresarial y es necesario implementar medidas preventivas y visibilizar estas situaciones de riesgo a las que someten a las trabajadoras en situación de gestación, las empresas que gestionan la sanidad privada en la Comunidad de Madrid.
CCOO recuerda que la protección de las trabajadoras en el entorno laboral "es un tema prioritario para el sindicato y es necesario promocionar espacios seguros y saludables. El objetivo principal de las acciones en esta materia es identificar, prevenir y minimizar cualquier factor que pueda representar un peligro para la salud de la trabajadora embarazada o del feto, así como en la fase de lactancia natural, tales como: exposición a sustancias químicas y gases anestésicos, radiaciones ionizantes, tareas que demandan esfuerzos físicos excesivos, condiciones de estrés laboral y a la exposición a riesgos psicosociales".
Por ello, ha exigido el cumplimiento de la legislación vigente y reclama a los responsables de la empresa que garanticen las medidas de seguridad, así como un compromiso ético con sus trabajadoras. “Queremos que la mujer embarazada pueda desempeñar su trabajo de manera segura y en condiciones que no afecten a su salud física o mental, ni al bienestar de su bebé”.