El presidente andaluz tiene un arriesgado concepto del ridículo cuando se expone a fotos de autobombo en la era de las redes sociales. Juan Manuel Moreno Bonilla se pone a pecho descubierto en manos de sus asesores de imagen y lo mismo se fotografía pidiendo el voto a una vaca entre susurros que fríe un huevo mientras las listas de espera sanitarias siguen desbocadas y ya no cuenta con la misma consejera, Catalina García, que le pare los golpes porque él mismo decidió cesarla antes de tomar vacaciones para, a continuación y en el mismo día, premiarla con otro departamento también clave e igualmente polémico durante el mandato del PP en Andalucía: Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul. Ahí está la pasada crisis de Doñana a niel internacional para recordarlo.
Las poses de autobombo del presidente andaluz son incontables, tanto en la forma como en el fondo, con dudosos resultados a efectos prácticos. Un ejemplo más: el gobierno de Moreno Bonilla decidió echar el resto este año para promocionar turísticamente Andalucía en el exterior. La impactante campaña turística ‘Andalusian Crush’ ha contado con un presupuesto público de casi 40 millones de euros, para promocionar la imagen de la comunidad autónoma con 800 acciones de comunicación en lugares emblemáticos de ciudades como Londres o Nueva York, y en otros países como México, Canadá, Japón y China. El impacto ha sido toda una realidad, pero en términos negativos, ya que estos días se ha conocido que la comunidad más poblada del país y una de las que más turistas recibe cada año contabilizó el pasado julio un 5,2% menosvisitantes respecto al mismo mes del pasado 2023, un dato que ha hecho saltar todas las alertas en el sector, clave en Andalucía, porque supone la mayor caída en dos décadas (sin contar los años de pandemia) de turistas en un mes fundamental como julio.
El turismo cae en julio como nunca en dos décadas pese a haber invertido casi 40 millones de euros en la mediática campaña ‘Andalusian Crush’
El ejecutivo de Moreno Bonilla ya sabe cuál será a partir de este próximo septiembre su hoja de ruta: Cataluña. No oculta el presidente andaluz que el pacto del Govern catalán de Salvador Illa con ERC le ha caído llovido del cielo precisamente cuando más cuestionada estaba siendo su gestión en esta su segunda legislatura en los departamentos clave de sanidad, educación y servicios sociales. Desde este mismo instante, el PP andaluz ha iniciado una campaña de movilización ciudadana para protestar por lo que considera el agravio del “cupo catalán”. Tampoco ha estado del todo fino el equipo de imagen de Moreno Bonilla en el detalle de situar estas inminentes movilizaciones que pretende el PP andaluz al mismo nivel que las multitudinarias manifestaciones de 1977 del pueblo andaluz para exigir autonomía plena.
Recordar 1977 para el Partido Popular de MBonilla, fundado por el ex Ministro de Franco, Manuel Fraga, será un acontecimiento único y espectacular. El 6 de marzo de 1977, con Manuel Fraga de líder, los siete magníficos del tardo franquismo, celebran el congreso fundacional de su… pic.twitter.com/Vxr6lGNEMV
— Manuel Pezzi (@manolopezzi) August 19, 2024
La oposición política le han recordado a Moreno Bonilla que el andalucismo de nuevo cuño que pregona el PP andaluz de un tiempo a esta parte choca frontalmente con la Historia. “El 4 de diciembre (de 1977, recordado desde 2022 por el ejecutivo de Moreno Bonilla como el Día de la Bandera de Andalucía) ellos no estaban con el pueblo andaluz, ni con los manifestantes, ni con los que quisimos investigar el asesinato de García Caparrós en Málaga. Moreno Bonilla, cuídate de los nones o de los idus de diciembre”, ha escrito en la red social X el presidente de los socialistas andaluces, Manuel Pezzi.
Mientras tanto, los problemas de los pilares fundamentales del estado del bienestar en Andalucía continúan sin visos de mejoría a corto o medio plazo: las listas de espera siguen si reducirse, el colapso de la atención primaria es una realidad diaria, la reducción de cientos de aulas en la educación pública, el incumplimiento de ratios de aulas por alumnos o también el déficit de profesionales sanitarios y de educación, entre otros aspectos, son evidencias que la oposición viene denunciando reiteradamente desde que Moreno Bonilla está al frente de Andalucía, entre pose y pose.