Un hombre de 39 años ha matado presuntamente a su hijo de 11 y después se ha suicidado en un domicilio de la localidad murciana de Beniel. El supuesto parricida tenía antecedentes por malos tratos y había quebrantado una orden de alejamiento dictada el pasado mes.
La Policía local de este municipio recibió una llamada del entorno familiar ya que el padre no había entregado el niño a su madre después de cumplirse el periodo de visitas que le correspondía el día anterior a las 20.30 horas.
Así, la policía acudió a la vivienda del padre del niño, donde encontró el cuerpo del menor tendido en el suelo entre el pasillo y el baño y, en la cocina el del padre ahorcado.
La Guardia Civil, que también se trasladó a la vivienda, se hará cargo de la investigación.