En un decisivo paso hacia el inicio de la XV Legislatura en el Congreso de los Diputados, se espera que la Mesa del Congreso dé luz verde a la creación de grupos parlamentarios para Esquerra Republicana (ERC) y Junts con escaños prestados de otras formaciones. Estos partidos, que no cumplen los requisitos establecidos por el Reglamento del Congreso, han buscado una solución colaborativa para asegurar su representación. Aunque ha suscitado ciertas críticas, esta medida debe ser valorada en el contexto de una representación política más diversa e inclusiva.
De acuerdo con el Reglamento del Congreso, se exige un mínimo de 15 diputados o una combinación de escaños y porcentaje de votos para la conformación de un grupo parlamentario.
Tanto ERC como Junts, con siete diputados cada uno, no cumplen estos criterios en todas las circunscripciones ni siquiera en Cataluña. Ante esta dificultad, el PSOE y Sumar han tomado la iniciativa de asignar diputados «prestados» para lograr el cumplimiento de los requisitos necesarios.
Voces críticas
Aunque algunas voces críticas, especialmente el Partido Popular (PP), han calificado esta acción como un «cambalache» que favorece a los partidos independentistas, es importante recordar que esta estrategia no es novedosa en el Congreso. En legislaturas anteriores, se ha recurrido a cesiones similares para permitir la representación de diversas fuerzas políticas.
El PSOE, por su parte, ha sostenido que esta medida busca garantizar la representatividad territorial en el Congreso, en concordancia con una sentencia del Tribunal Constitucional de 1995 que permite considerar el requisito del 15% como un promedio en el conjunto de circunscripciones, en lugar de una exigencia individual en cada provincia.
Ventajas de tener grupo parlamentario
Es relevante resaltar que contar con un grupo parlamentario propio confiere ventajas políticas y económicas sustanciales. Los grupos parlamentarios tienen un papel central en las comisiones, debates y sesiones de control al Gobierno. Además, tienen acceso a subvenciones económicas y visibilidad mediática, aspectos fundamentales para su desempeño y representación.
Esta medida es un claro avance hacia una política más inclusiva y diversa. La presencia de diversos grupos parlamentarios, incluso aquellos que no cumplen estrictamente los requisitos en ciertas circunscripciones, puede enriquecer el debate político y garantizar una representación más amplia de las voces ciudadanas.
La autorización de grupos parlamentarios prestados por parte de la Mesa del Congreso para ERC y Junts, aunque ha generado polémica, y más allá de las opiniones divididas, refleja la voluntad de asegurar una participación equitativa de distintas voces en el Congreso y establecer las bases para debates más enriquecedores en el ámbito legislativo.
