El Secretario General de UGT, Pepe Álvarez, ha sido elegido, con el 91,5%de los votos,Vicepresidente de la Confederación Europea de Sindicatos (CES) durante la celebración de su 14º Congreso, celebrado esta semana en Viena (Austria) bajo el lema “¡UNA EUROPA MÁS JUSTA PARA LOS Y LAS TRABAJADORAS! Democracia y justicia social; Transiciones justas; Empleos de calidad y salarios más altos”.
El Congreso ha reelegido a Luca Visentini como Secretario General y ha elegido a Laurent Berger como presidente. Este nuevo sistema de Presidencia, con un presidente y cuatro vicepresidentes, otorga un mayor peso político a toda la Confederación.
En estos próximos cuatro años se impulsará el diálogo social y la negociación colectiva, así como las políticas sociales en Europa y, en definitiva, el fortalecimiento del movimiento sindical europeo.
Además, los más de 600 delegadas y delegados sindicales, incluidos los secretarios generales y/o presidentes de las 90 organizaciones sindicales nacionales de 38 países europeos y 10 federaciones sindicales sectoriales europeas que han participado han adoptado, entre otros documentos, el Manifiesto de Viena y el Programa de Acción del Movimiento Sindical 2019-2023 que establece las bases de la acción sindical europea para los próximos años.
La dirección de la CES es paritaria entre hombres y mujeres, al igual que los 600 delegados sindicales de todo el continente que participan en el congreso, que concluirá mañana.
La CES ha llamado a votar en las elecciones europeas que han comenzado este miércoles para frenar a los partidos de extrema derecha y euroescépticos, y defender una Europa más social y con más derechos para todos los ciudadanos y ciudadanas.
Luca Visentini ha reclamado a los partidos y a los políticos la necesidad de «un renovado contrato social europeo» que haga del continente europeo, un lugar más justo, después de diez años de austeridad.
Los sindicatos europeos también han exigido un aumento en las inversiones públicas, y más medidas contra la brecha salarial entre géneros y entre empleados del norte y el sur de la Unión Europea con salarios mínimos más iguales entre diferentes regiones.
