Un nuevo informe de la Oficina Europea de Medio Ambiente (EEB) y sus organizaciones miembro revela una contaminación generalizada por PFAS en peces silvestres de toda Europa, con muchas muestras que superan con creces los nuevos límites de seguridad propuestos. Estas sustancias, denominadas "sustancias químicas permanentes", representan una amenaza creciente para la salud pública y los ecosistemas acuáticos. Sin embargo, los Estados miembros de la UE presionan para retrasar las medidas necesarias para controlar la contaminación hasta 2039.
El informe de la EEB, "Productos químicos que envenenan permanentemente las aguas y los peces de Europa: La punta del iceberg de los PFAS", analiza datos de monitoreo de Austria, Francia, Alemania, Italia, Polonia, España y Suecia. Muestra que la mayoría de las muestras de pescado analizadas entre 2009 y 2023 contenían niveles peligrosos de PFOS, un PFAS persistente identificado como posiblemente cancerígeno para los humanos.
Casi todos los valores notificados superan los nuevos límites de seguridad propuestos por la UE.
El 24% de los valores en Suecia, el 19% en Francia y entre el 15 y el 17% en Austria y España superan el límite en 500 veces o más.
Algunas muestras de Suecia, Alemania y España superaron el estándar propuesto en más de 10.000 veces.
Este análisis sólo cubre un químico PFAS – PFOS – mientras que las nuevas propuestas de la UE apuntarían a un grupo de 24, lo que sugiere que la escala de contaminación probablemente sea mucho mayor.
Las normas obsoletas de la UE están enmascarando la verdadera magnitud de la crisis
Actualmente, los Estados miembros solo están obligados a monitorizar los PFOS, y no los miles de otros PFAS nocivos. Una propuesta de 2022 de la Comisión Europea para actualizar la legislación de la UE sobre contaminación del agua, incluyendo la regulación de un grupo de PFAS en aguas costeras y dulces, incluida la biota, ha sufrido varios retrasos, y los gobiernos ahora pretenden aplazar su cumplimiento hasta 2039 , lo que podría desperdiciar más de una década de acción en la lucha urgente contra la contaminación tóxica.
La EEB ha exigido "medidas inmediatas a nivel de la UE para proteger la naturaleza y la salud pública de la contaminación".
Según Sara Johansson y Athénaïs Georges de EEB, "la contaminación de las aguas de la UE y su fauna silvestre por PFAS está generalizada, pero se denuncia considerablemente. Se necesitan urgentemente obligaciones coherentes para que los Estados miembros actúen para limitar una mayor contaminación del agua, por ejemplo, mediante la implementación de permisos de vertido más estrictos para la industria. Instamos a las instituciones de la UE a que dejen de retrasar la acción y adopten normas actualizadas de la UE sobre contaminación del agua, con la obligación vinculante de que los Estados miembros incluyan medidas para limitar la contaminación por PFAS y otros contaminantes prioritarios en los próximos Planes Hidrográficos de Cuenca".
Respecto al caso de España, Koldo Hernández Lozano y Kistiñe García, de Ecologistas en Acción, han afirmado que "el alto nivel de contaminación por PFAS detectado en España, a pesar del reducido número de puntos de control y del limitado número de muestras analizadas, y a pesar de que sólo se ha evaluado una sustancia PFAS, indica claramente que se deben tomar medidas urgentes para reducir la contaminación. El riesgo que este tipo de contaminación supone para la salud humana no puede ignorarse; tomar medidas eficaces no es una opción, es un deber".
El próximo momento clave: las instituciones de la UE se reúnen el 23 de septiembre para decidir el futuro de las normas europeas sobre contaminación del agua.
En este sentido, más de 450 científicos han pedido a las instituciones de la UE que rechacen las propuestas que socavan la Directiva Marco del Agua y sus objetivos medioambientales y que, en su lugar, adopten urgentemente normas actualizadas que reflejen el estado del conocimiento científico actual para abordar la contaminación química del agua.