Dos organizaciones brasileñas de derechos humanos presentaron una «nota informativa» esta semana ante la Corte Penal Internacional (CPI) en La Haya solicitando una «investigación preliminar sobre la incitación al genocidio» contra el presidente brasileño Jair Bolsonaro.
El Colectivo de Defensa de los Derechos Humanos y la Comisión Arns alegan que “desde el comienzo de su gobierno, el presidente Jair Bolsonaro ha incitado a las violaciones y la violencia contra las poblaciones indígenas y tradicionales, ha debilitado las instituciones de control y aplicación, ha destituido a los investigadores laureados de las organizaciones de investigación. y se mantuvo abiertamente en silencio sobre la respuesta a los crímenes ambientales en la Amazonia ”, se lee en la queja de la CPI.
«Creemos que hay elementos que caracterizan el genocidio», dijo citado por el periódico británico The Guardian, José Carlos Dias, presidente de la Comisión Arns y ex ministro de Justicia de Fernando Henrique Cardoso. “Es triste ver al Presidente de Brasil enfrentar este proceso, pero es necesario proteger los derechos de nuestro pueblo. Las medidas que está tomando el gobierno me recuerdan las medidas que ha tomado la dictadura”, dijo el ex gobernante.
Desde el comienzo de su mandato, Bolsonaro, que ha estado repitiendo reclamos discriminatorios contra los pueblos indígenas , ha realizado esfuerzos para desinflar y desmantelar a Funai, la agencia federal responsable de proteger a más de 300 tribus, al tiempo que aboga por la apertura de reservas indígenas a la minería .
Según el Estatuto de Roma, que rige la CPI, el organismo ahora debe abrir un proceso de consulta para evaluar si hay una base para iniciar una investigación. En este procedimiento preliminar, el Fiscal de la CPI Fatou Bensouda solicitará información de los gobiernos estatales brasileños, otros países, las Naciones Unidas y organizaciones no gubernamentales.
