Las grandes empresas de e-commerce han reventado el sector de la paquetería. De los más de 210.000 afiliados al RETA en el sector del transporte, alrededor del 30% se dedican al transporte de mercancías de menos de 3.500 kg de masa máxima autorizada. Fundamentalmente, estos autónomos se dedican al reparto de paquetería de última milla y llegan a trabajar, de media, 14 horas diarias, al igual que los trabajadores por cuenta ajena en este sector. UPTA denuncia esta situación de semiesclavitud que se produce en el transporte en furgonetas de pequeño tonelaje.
Los servicios de distribución de las grandes empresas de venta online han llevado a los profesionales del sector a marcar un número ilimitado de horas de conducción de carga y de descarga, situación que está afectando no solamente a los derechos de los trabajadores por cuenta ajena y de los trabajadores autónomos, sino que también, hace mella en algo tan importante como la seguridad vial, puesto que este tipo de vehículos no están sujetos a ningún control de horas de conducción.
Desde UPTA, emprenderán una campaña para poner esta situación en conocimiento de todas las administraciones implicadas en el transporte de mercancías; desde la mesa nacional del transporte, a la cual pertenecen las patronales del sector, hasta al Ministerio de Trabajo, para denunciar la falsedad contractual, ya que gran parte de los autónomos que desarrollan la actividad de transporte de mercancía fraccionada, son falsos autónomos.
Más derechos para los transportistas
Para Eduardo Abad, presidente de UPTA, “solo hay un camino para acabar con esta situación de en un sector que tendría que estar perfectamente organizado y reglado por las administraciones y que, desgraciadamente, está fuera de control. La solución es implantar el tacógrafo para todos aquellos vehículos que, con independencia de su capacidad de carga, se dedican al transporte de mercancías en los epígrafes correspondientes a esa actividad.
Es urgente y necesario que una furgoneta de 1.500 kg de masa máxima autorizada, o un vehículo de carga ligera de menos de 3.500 kg de masa máxima autorizada, tengan como referencia el tacógrafo para controlar perfectamente las horas de conducción. No se trata solo de un problema de horarios de trabajo, sino también de una falta de cotización a la Seguridad Social por las horas extras que, de forma irregular, se realizan; además, en muchas ocasiones, prestan sus servicios como falsos autónomos.
En cualquier caso, esta situación se traduce en una falta de seguridad vial, puesto que trabajar 14 horas conduciendo y repartiendo paquetería, es una temeridad, teniendo en cuenta que, estas furgonetas transitan en las mismas carreteras y calles que el resto de los ciudadanos, aumentando el riesgo de accidentes de tráfico por el agotamiento de los trabajadores del sector del transporte de mercancías ligeras”.
Mayor precariedad y siniestralidad
A principios de año, la Unión de Pequeños Trabajadores Autónomos, UPTA, denunciaba la precariedad laboral a la que, considera, se ven sometidos quienes trabajan en servicios de paquetería. Según la organización, son los autónomos que más siniestralidad sufren. El año pasado registraron 15 accidentes mortales y 61 siniestros muy graves en España.
https://cdnapi.codev8.net/cms-player/a7efb051-7514-447f-9ea4-d74ea32c9193?startFromSecond=0 Los transportistas de paquetería son los trabajadores autónomos que más precariedad y siniestralidad sufren. Con sueldos precarios y jornadas de trece horas de media. Así lo denuncia la organización UPTA, que propone que los tacógrafos sean obligatorios también para este sector.
Mayor precariedad y siniestralidad
La Unión de Pequeños Trabajadores Autónomos, UPTA, denuncia la precariedad laboral a la que, considera, se ven sometidos quienes trabajan en servicios de paquetería. Según la organización son los autónomos que más siniestralidad sufren. El año pasado registraron 15 accidentes mortales y 61 siniestros muy graves en España.
Según Eduardo Abad, presidente de UPTA: «Los transportistas autónomos de paquetería en Extremadura están trabajando en unas condiciones absolutamente denunciables. Las empresas cargadoras les imponen tiempos de entrega que son absolutamente denunciables. Trabajan de media 13 horas al día».
Jornadas interminables que no vienen reflejadas en los sueldos, según han constatado a Canal Extremadura algunos trabajadores de la región, tanto autónomos como por cuenta ajena.
«El sueldo suele ser de mil o mil cien, incluso he visto gente que cobraba menos, unos novecientos. Luego los sábados van aparte, pero con estas condiciones nadie quiere trabajar los sábados, pero trabajamos obligados», señala un trabajador asalariado, que prefiere no salir en pantalla.
«Si te pones a echar cuentas te sale la hora a cinco, seis o siete euros como mucho, pues tienes que entregar muchas veces más paquetes de los que deberías entregar«, asegura un repartidor autónomo.
UPTA pide tacógrafos para vehículos ligeros
Para la organización de autónomos la solución está en modificar la Ley y exigir que todos los vehículos de autónomos de transporte, reparto de paquetería y similares, lleven obligatoriamente un tacógrafo, como ya lo hacen los camiones.
«Con esta simple modificación en la Ley del Transporte de Mercancías por Carretera se limitarían las horas de descanso de este colectivo, que está al fondo en la escala de la precariedad laboral», asegura el presidente de UPTA, Eduardo Abad.
UPTA se ha puesto en contacto con la Fiscalía General de Seguridad en el Trabajo para lograr un informe que permita un cambio legislativo en Seguridad Vial
Evolución del e-commerce en España
Con datos de la Comisión Nacional de los Valores y la Competencia (CNMC), que analiza las transacciones comerciales entre sitios web de comercio electrónico españoles, en 2020 el comercio electrónico superó en España los 51.600 millones de euros, un 5,8% más que el año anterior (48.800 millones de euros).
Otros informes de actividad apuntan que el comercio electrónico entre empresas y particulares (B2C) se valoró en 2020 en unos 58.750 millones de euros, un 16,6% más que en el año anterior.
En 2021, aunque los datos de la CNMC son sólo del primer trimestre, el aumento continuó siendo evidente, dado que el comercio electrónico superó los 12.400 millones de euros, casi un 2% más que en el mismo trimestre del año anterior. De esta forma, la estimación para el cierre de 2021 se situó en torno a los 67.000 millones de euros, un 14% más respecto al año anterior.
E-commerce y paquetería, socios indiscutibles
El sector de la paquetería ha evolucionado al alza durante los últimos años, por el hecho de estar muy ligado a las compras por Internet, constatando este sector de actividad crecimientos sostenidos que, a raíz de la irrupción de la pandemia, han experimentado aumentos superiores.
Actualmente, el comercio electrónico, tanto si se trata de operaciones C2C (Consumer to Consumer), B2C (Business to Consumer) o B2B (Business to Business), está creciendo de forma sostenida en todo el mundo.
Según datos de Statista, las ventas de comercio electrónico a nivel mundial se han multiplicado por diez en los últimos años y han pasado de los 1.336 mil millones de dólares en 2014, a los 4.878 mil millones de dólares en 2021.
Este crecimiento se ha visto impulsado por el hecho de que empresas y particulares han aumentado las compras a través de Internet por las restricciones sanitarias y de movilidad que se han implantado debido a la pandemia del Covid-19
Además, el e-commerce se ha incrementado porque los negocios necesitan crecer y una herramienta que se utiliza para conseguirlo es la venta de bienes y productos a través de las grandes plataformas de comercio electrónico.
No todo se puede vender en la red
No todo puede venderse por Internet y existen una serie de artículos prohibidos y restringidos que no pueden enviarse a través de servicios de paquetería.
Los productos que están prohibidos en paquetería son: mercancías peligrosas (productos químicos, inflamables o tóxicos, armas y municiones, artículos de pirotecnia), tabaco, drogas, alimentos perecederos, animales vivos, pieles y partes de animales, oro y piedras preciosas, entre otros.
Los productos restringidos o que se recomienda no enviar por servicios de paquetería son: alcohol, aceite de oliva, perfumes, comida no perecedera, flores y plantas, semillas, medicamentos, relojes, entre otros.
