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El silencio de Sánchez y Ayuso frente a los asesinatos selectivos de Israel los convierte en cómplices del exterminio y el apartheid

Sánchez y Ayuso, tan distintos en tantas cosas, son exactamente iguales en defender a los poderosos frente a los oprimidos. No hace falta volver a recordar la traición del actual presidente en funciones al pueblo saharaui para tener el beneplácito y la bendición del rey de Marruecos que, por cierto, es aliado de Israel.

José Antonio Gómez
José Antonio Gómez
Director de Diario16. Escritor y analista político. Autor de los ensayos políticos "Gobernar es repartir dolor", "Regeneración", "El líder que marchitó a la Rosa", "IRPH: Operación de Estado" y de las novelas "Josaphat" y "El futuro nos espera".
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análisis

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Pedro Sánchez e Isabel Díaz Ayuso se unieron ayer en acudir raudos a defender a Israel y a condenar los ataques de Hamás. Sin embargo, ni una sola condena ni a la respuesta militar contra Gaza ni a las represalias de los colonos ultrasionistas. El silencio ante estos atropellos los convierte en cómplices de la política de exterminio y de apartheid que Israel ejecuta contra el pueblo palestino.

Es cierto que una facción de Hamás lanzó contra territorio israelí 5.000 proyectiles. Es cierto que fuerzas terrestres gazatíes irrumpieron en ciudades de Israel. Pero también es cierto, y sin querer justificar el ataque, que se trató de una respuesta a la ola de violencia que lleva aplicando de manera implacable Israel desde que los partidos ultraortodoxos están en el gobierno, donde hay ministros fanáticos y zumbados que no dudan en afirmar que aquella tierra es de los judíos porque un tal Yaveh se la entregó a un tal Abraham, hechos que no están sustentados por la historia, sino por la leyenda bíblica.

Ni Sánchez ni Ayuso han condenado los hechos atroces que Israel perpetró ayer. Aviones de combate israelíes atacaron zonas agrícolas y residenciales de la ciudad de Beit Lahiya. Afortunadamente, no hubo víctimas mortales.

Un poco más tarde, cazas del Ejército de Israel lanzaron un brutal ataque aéreo contra el barrio residencial de Al-Nasr, cercano a la Universidad de Al-Quds Open de la ciudad de Gaza, destruyendo edificios donde vivían civiles y, por supuesto, no eran objetivos militares.

La crueldad de los militares israelíes les llevó a disparar a las ambulancias donde se traslada a los heridos a los centros sanitarios y lanzaron misiles contra diferentes hospitales, como sucedió, por ejemplo, en el Hospital Nasser en Khan Yunis. Sánchez y Ayuso no han condenado esto tampoco.

Colonos ultrasionistas atacan a los agricultores palestinos escoltados por el Ejército de Israel

Por otro lado, la actividad terrorista de los colonos ultrasionistas se ha intensificado en distintas zonas rurales. En Khallet Makhoul se produjo un ataque a pastores palestinos que no es un hecho aislado, sino que se suma a las miles de agresiones que sufren ganaderos y campesinos palestinos por parte de quienes están robando la tierra y viven ahí de manera ilegal y en contra del derecho internacional. Estas agresiones, por cierto, se producen con la protección del Ejército de Israel. De esto no se ha escuchado ni una sola condena ni de Pedro Sánchez ni de Isabel Díaz Ayuso.

Desde que se iniciaron estos ataques por parte de Israel, en la Franja de Gaza se han registrado más de 200 muertos y cerca de 2.000 heridos, según cifras del Ministerio de Sanidad de la Autoridad Palestina.

Sánchez y Ayuso, tan distintos en tantas cosas, son exactamente iguales en defender a los poderosos frente a los oprimidos. No hace falta volver a recordar la traición del actual presidente en funciones al pueblo saharaui para tener el beneplácito y la bendición del rey de Marruecos que, por cierto, es aliado de Israel.

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8 COMENTARIOS

  1. Sanchez,como tantos otros españoles y no españoles,obedecen ordenes de EEUU.No es otra cosa.
    Recordar que EEUU esta inundado de capital judio sionista,lo judios nazi-facistas.
    La ONU ha condenado a Israel decenas de veces por sus agresiones a los palestinos durante decadas..y por la invasion y
    anexiones de parte del territorio palestino que esta siendo privado de sus tierras para entregarlas a colonos judios.
    Los palestinos tienen todo el dereho del mundo a defenderse y atacar a los usurpadores.

  2. No podemos olvidar que el Sionismo nació junto al Nazismo en el mismo área cultural: la cultura alemana. Ambas doctrinas descansan en la superioridad de un pueblo sobre todos los demás y que estos últimos deben de ser exterminados o someterse al pueblo elegido.
    Entregarle Palestina a un grupo de europeos de cultura judía, asquenazi, que en nombre de un dios le entregaron un territorio habitado desde milenios por un pueblo, los palestinos; iniciándose así su genocidio.
    El PSOE y Sánchez no hacen otra cosa que obedecer las ordenes dictadas por su amo: USA

    • El sionismo es puro supremacismo racial y cultural, económico también, pero para ser y comportarse como pedazo de supremacista no hace falta ser sionista, bastaría con recordar el imperio británico o el típico caso de los nazis para poder compararlos y meterlos a todos en el mismo saco…

      Y aquí en España, por ejemplo, hay intelectuales muy de izquierdas, muy antisionistas, que luego se comportan como auténticos supremacistas en su día a dia, que están marcados y llenos de sesgos debido a su posición elitista y dirigente (de origen sefardí, claro). A algunos se les ha visto crecer faltos de motivación y un tanto apagados, distantes de sus vecinos y colegas, hasta que, creciditos ya, encuentran trabajos que solo merecen ellos en Londres, en Berlín, en Massachusetts… y por fin, se les ilumina la vida, encuentran su sitio y se mueven como pez el agua entre supremacistas que esperan heredar la tierra prometida… tal cual.

      Los judíos, según nos cuentan judíos y no judíos, han sido perseguidos a lo largo de la historia en distintos lugares, prácticamente en todos y por todos… me pregunto si entre las posibles causas de tal coincidencia podrían estar esas comunidades fundamentalistas, exclusivas y excluyentes que adoctrinan a su hijos desde el principio de los tiempos en el supremacismo racial, y; es posible que la mayor parte de su cultura israelita, tan antigua y tan bien conservada, sea precisamente eso, puro supremacismo elitista y dirigente.

      Por lo visto, muchas de las víctimas israelis son (o eran) jóvenes celebrando fiestas raves en el desierto, hippies, puede que jóvenes que están (o estaban) en contra de muchas medidas tomadas por su gobierno de extrema derecha y quién sabe si hasta partidarios de un estado palestino. Estos jóvenes, que han mamado supremacismo en casa, en la escuela, en la sinagoga, etc, son a la vez víctimas del supremacismo israelita y deberían abandonar contá puedan la Palestina ocupada, porque por más tecnología y apoyo anglosajón que reciban, cabe la probabilidad cierta de que el futuro del estado de Israel sea desaparecer de forma violenta y no precisamente en un cataclismo natural. Y como lo saben, los sionistas y todos sus obedientes siervos, nazis todos, hacen lo que pueden para que los que desaparezcan sean sus vecinos como Líbano, Jordania, Irán… vamos, como para que los sauditas acaben fiándose de esa gentuza y normalicen relaciones con tan abominable Estado: No hay amistad posible, solo cabe la bíblica venganza

  3. Yo tengo en mi casa una bandera palestina, hace mucho ya. De España o Israel ni una.
    Una gallega; la más bonita de todas. También una noruega que me regalo el capitán de la fragata Roald Amundsen en Bergen junto a unos gemelos y pasacorbatas de oro y con la figura (plástico creo) del barco. Las cosas a las que uno da valor, caprichosa o desordenadamente.

  4. De la sra Ayuso actua com ya es normal , ella ya tiene en su haber ,mientras no se compruebe lo contrario, creo que son unas 7200 muertes.¿Como se va a reocupar de los palestinos? Del Sr. Sánchez no. ¿Se acuerdan del Sr. Aznar y cuando nos metió en una guerra que nadie aprobaba? ¿He intentó ponerse una medalla por eso? Bien, el Sr. Sánchez que yo sepa todavía no ha caído tan bajo.
    Seguramente todos hemos tenido limitaciones de los padres cuando, jóvenes, queríamos hacer cosas peligrosas. Nos lo impedían, no por limitarnos en el progreso sino por evitarnos males mayores.

  5. Yo recuerdo como comenzó la intifada, apenas mujeres y chiquillos apedreando a los colonos que tomaban las tierras como suyas. La patria ieraelí es bíblica, aunque su raza nunca dejó Palestina desde hace doce mil años. Hay un conflicto que es un grave error tomarlo como algo racial o creencial, porque en 1946 en Líbano y Palestina habría cuando menos un trenta por ciento de cristianos y un veinte por ciento judíos. A Beirut la llamaban la Suiza de oriente próximo y en Palestina correspondía la suerte del buen vecino. Al llegar los judíos deportados de Europa, a quienes no los quería ni dios Javeh, quisieron establecer sus territorios los auténticos propietarios, pero ninguno de los países vecinos aceptaba un estado judío en mitad de sus tierras y hubo varios conflictos que jamás terminaron, entre ellos la guerra de los seis días, porque un estado minúsculo, pero que bien armado por las potencias occidentales fue quien de vencer en ese tiempo al ejército de cuatro países, y el dinero que han recibido de Alemania por los crímenes de guerra, con toda justicia, lo invirtieron en armamento contra toda justicia y lo emplean en intentar sabotear constantemente el orden y la tranquilidad de sus vecinos. Ya tomaron los altos del Golán, a cientos de quilómetros de su frontera inicial, y con ello, antes, territorio necesario para asegurarse el agua para ellos. Hay un estado ilegal que utiliza métodos arcaicos que no sin bíblicos, para mí no es culpable el pueblo de los desfases de su ejército y sus colonos, que sólo son ladrones y oportunistas.
    Pero es vuestro juicio; hacedlo también con juicio. No como la derecha.
    Desde la OLP, hasta la última de las células y facciones terroristas musulmanas toman como ejemplo está cuestión llevándola a terreno religioso porque llegaron a justificar con el Talmud, libro de enseñanza tradicional judaica, la voluntad de dios para la supremacía sionista. Ahora es una guerra santa.
    Menos mal que había una rapaza aquí que señalaba la falta y toca templar las gaitas.

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