El techo de cristal llega tan alto como el cielo mismo. Basta ver datos como los que dibujan que en el mapa mundial de pilotos el número de mujeres aviadoras es solo de un 3%. En España la cosa está igual de mal. De los 6.000 pilotos que hay, 200 son mujeres (las mismas que están afiliadas al SEPLA).
Para darle la vuelta a esta tortilla acaba de nacer Aviadoras @aviadoras_AEP una asociación que quiere dar voz y alas a quienes no se les ha oídos ni visto. A los mandos de esta comunidad está Vanesa de Velasco @Vanesadevelasco, piloto de líneas aéreas. “Pretendemos crear comunidad, igualdad y el equilibrio entre hombres y mujeres en la aviación así como fomentar la conciliación y potenciar el acceso de la mujer a esta maravillosa profesión a la que se llega por vocación. Queremos tomar impulso y hacer añicos ese techo que no se ve pero que tanto nos lastra”, recalca de Velasco.
Volar es cuestión de pasión y formación….no de sexo y sin embargo en este mundo quien pilota es el sexo masculino.
En el mundo hay un 3% y en España un 3,5%. La profesión de piloto es vocacional en la mayoría de los casos. Las vocaciones tienen que ver con los referentes y es difícil encontrar referentes femeninos en la aviación, ya que, aunque existen, son poco conocidos. Las revistas de aviación solían estar llenas de imágenes de hombres y las películas muestran a pilotos hombres y a TCPs mujeres (azafatas). De esta manera es complicado que una mujer piense que puede ser piloto si no tiene un referente muy cercano que despierte esa vocación. Aviadoras pretende dar visibilidad a la profesión, mostrar referentes y crear comunidad para animar a que haya más mujeres piloto.
¿El machismo es el símil de precipitarte desde el cielo?
Eso se lo podemos preguntar a Newton. En aviación nos gusta planear con cuidado y seguridad a tierra.
¿Cuántas veces te han ninguneado?
Las veces que me he dejado.
¿Se calla más de lo que se denuncia en cuanto a la discriminación de las mujeres pilotos?
No he escuchado a ninguna compañera mujer piloto que se sienta discriminada por ser mujer. Nunca. Lo que sí he escuchado son quejas de todo el colectivo, hombres y mujeres, que se dan la mano unas con las otras. Cuidado de los hijos, días libres, falta de tiempo, sensación de responsabilidad… En mi opinión ambos solemos tener las mismas sensaciones. Y ambos hablamos bien alto cuando hay algo que no nos gusta.
Desde la plataforma de Aviadoras nos decantamos por la igualdad y la diversidad, trabajando desde la empatía y la mejora social.
Y entonces llega el momento de montar la asociación y de daros la voz que siempre se os quitó…
No diría que nos hayan quitado la voz, sino que quizás no hayamos encontrado la manera de proyectarla bien. Ahora ha llegado ese momento, el propio eslogan de Aviadoras es “un proyecto para darnos voz”. De hecho, puedo decir que me siento satisfecha de haber creado este proyecto en el seno de dos asociaciones, AEP y SEPLA, predominantemente masculinas. Y nos están apoyando muchísimo.
Y te encuentras que la asociación es más que bien recibida y que a ella se apuntan 200 aviadoras.
Aviadoras pertenece a la AEP que depende del SEPLA. Hay 6000 pilotos de los que 200 son mujeres. Es un movimiento de todos. Hay pilotos más activos y otros menos involucrados. Esto es una carrera a largo plazo, para todos y de todos.
¿La gran tarea es buscar referentes que motiven a las jóvenes a estudiar carreras como la aeronáutica?
Hay muchos referentes, lo que pasa es que son poco conocidos. Aviadoras quiere impulsar el conocimiento mediante sus actividades y página web de que ha habido y hay mujeres en la industria. Con cargos más altos o medios, pero las hay. Estamos, en conjunto con la Agencia Estatal de Seguridad Aérea, intentando enseñar a las nuevas generaciones que las carreras técnicas no son cuestión de sexo, sino de querer y de intentar hacerlo, como lo hicieron antes otras muchas mujeres.
¿Qué diría de vosotras Mari Pepa Colomer Luque, la primera mujer piloto de la aviación española?
Maria Bernaldo de Quirós y Bustillo fue la primera mujer que tuvo una licencia de vuelo frente a la creencia de que fue Pepa Colomer. Ella fue la primera catalana. Maria Bernaldo decía que no quería sentirse como un fardo en el avión, que quería sentir que lo pilotaba ella. Eso era lo que más le preocupaba. Supongo que se hubiera sentido orgullosa ya que el espíritu de Aviadoras no es otro que el de lograr que haya más mujeres en la aviación y de normalizar su presencia. No hay más detrás de Aviadoras que el querer mostrar que llevar un avión y estar seguras de poder hacerlo es lo normal.
¿El cielo os da alas para sobrevolar cualquier situación de desventaja?
La aviación es una profesión maravillosa que nos da alas para poder enfrentarnos a la vida con los ojos del aviador, que va recorriendo millas y siempre tiene en cuenta que hay mucho más por descubrir más allá del horizonte.
