En el actual mercado del fútbol, cualquier equipo puede jugar en cualquier liga, siempre y cuando el resto de los clubes esté de acuerdo en admitirlos. Hace años se habló de la posibilidad de que el FC Barcelona abandonara la liga española para incorporarse a la Ligue 1. Lo mismo sucedió con el Celtic y el Glasgow Rangers a la hora de competir en la Premier League inglesa.
El escándalo de los pagos por un valor cercano a los 7 millones de euros del Barça al ex número dos del Comité Técnico de Árbitros, José María Enríquez Negreira, ha destapado una caja de pandora de la que aún no se perfilan las consecuencias reales para el club culé. Lo que sí está claro es que las informaciones publicadas por la Cadena SER y El Mundo, principalmente, han hecho mucho daño al prestigio del fútbol español. Las consecuencias pueden, incluso, afectar a la candidatura para organizar el Mundial de 2030 al que se presentan conjuntamente España, Portugal y la presencia testimonial de Ucrania.
Tras la publicación de la documentación, resultó cuanto menos extraño que ningún equipo profesional del fútbol español reaccionara, sobre todo los más perjudicados por las actuaciones arbitrales durante los años en los que el Barça pagó a Enríquez Negreira. Real Madrid, Atlético de Madrid y Sevilla perdieron títulos por pocos puntos durante esa época. Otros clubes podrían haber clasificado mejor o entrar en competiciones europeas por las decisiones erróneas de los árbitros en favor del Barça. A pesar de todo, durante la jornada de liga del pasado fin de semana, los equipos mantuvieron un silencio sepulcral mientras los aficionados asumían estupefactos la magnitud del escándalo.
La única reacción se produjo por parte del presidente de LaLiga, Javier Tebas, que afirmó rápidamente que no habría sanciones deportivas al FC Barcelona porque los posibles delitos habían prescrito en la justicia deportiva, tal y como señala la Ley del Deporte, tanto la aprobada por el gobierno de Pedro Sánchez como la que estaba vigente durante los años en que se produjeron los pagos a Enríquez Negreira.
Tebas, evidentemente, tiene un interés económico. LaLiga tendría que vender mucho más baratos los paquetes de derechos televisivos si el Barça fuese descendido de categoría, tal y como sí ha ocurrido en países como Italia con la Juventus o Portugal con el Boavista.
Barça-Madrid: intereses comunes
Al final, los clubes han reaccionado esta semana y publicaron un comunicado conjunto en el que se piden responsabilidades por el escándalo que, evidentemente, no fue firmado ni por el Real Madrid ni por el FC Barcelona. ¿Por qué el club presidido por Florentino Pérez se ha mantenido al margen? La respuesta es que los dos grandes del fútbol español, en la actualidad, van de la mano porque tienen intereses comunes.
Por un lado está la Superliga, la nueva competición que ambos clubes, junto a la Juventus de Turín, mantienen viva y que será una revolución absoluta del fútbol dado que permitirá a los clubes gestionar una competición al margen del monopolio de FIFA, UEFA y las federaciones nacionales. Los cambios aplicados en la tipología, donde sí que hay una serie de aspectos basados en el rendimiento deportivo, acercan aún más a que lo que parecía un sueño se convierta en realidad.
Sin embargo, lo más preocupante para la liga española es lo que desde distintas fuentes próximas a las directivas de distintos clubes españoles han señalado a Diario16: la posibilidad de que tanto Real Madrid como FC Barcelona se estén planteando salir de la competición nacional para desembarcar en la Premier League.
La cantidad ingente de dinero que reciben los clubes ingleses por derechos de televisión ha provocado que el mercado de fichajes se haya inflacionado y los jugadores a los que pueden optar los dos principales clubes de España terminan jugando en la Premier. Además, está la amenaza constante de «clubes estado» como el PSG. En consecuencia, Madrid y Barça han visto que no pueden competir económicamente con los grandes clubes ingleses. En ocasiones, incluso, se les hace muy complicado frente a equipos de mitad de tabla de la liga inglesa.
Por otro lado, los ingresos por televisión a los que pueden optar tanto Real Madrid como FC Barcelona incrementarían significativamente lo que reciben en la actualidad en LaLiga. El club blanco cobró 160,9 millones, los culés 160,1 millones. En la Premier hay equipos como el Leicester City o el West Ham United que reciben en derechos una cantidad muy similar. Hay que tener en cuenta que la competición inglesa factura 3,5 veces más por derechos televisivos que la liga española. Es normal, por tanto, que el colista inglés reciba más de 115 millones, mientras que en España, un equipo de la zona baja de la tabla no llega a los 50 millones.
Otro asunto es la competitividad de la liga española. En los últimos años, a pesar de los éxitos en las competiciones europeas, LaLiga ha bajado significativamente en calidad. Cuando se ve un partido de la Premier parece que sea otro deporte. Más ritmo, más intensidad ofensiva. En España, por el contrario, los clubes han optado por el cerrojazo como sistema para no perder, lo que recuerda al Scudetto italiano de los años 80 y 90. Pocos goles, pocas oportunidades y demasiada táctica defensiva.
En consecuencia, no es descabellado pensar, como afirman las fuentes consultadas, que tanto Real Madrid como FC Barcelona se estén planteando marcharse a la Premier y que, incluso, ya se estén manteniendo contactos.
