El president de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha retrasado ya a estas horas dos convocatorias de su intervención ante las presiones que está recibiendo desde su propio partido, desde Esquerra y también de la CUP.
Por cambiar, ha modificado hasta el lugar de su intervención. Y es que, además de lo que ocurre dentro de la Generalitat, fuera una manifestación de miles de personas han unido su grito de “traidor”.
El nuevo rumbo que parecen tomar las decisiones de Puigdemont en favor de las elecciones autonómicas en Catalunya han provocado el enfado de la CUP, que ha salido en tromba a mostrar ese enojo con todas las letras. Tanto en declaraciones a los medios en los pasillos del Parlament como desde las respectivas redes sociales, los anticapitalistas se han quejado por no formar parte de las últimas reuniones que tienen lugar en Palau y por el cariz de las informaciones que se desprenden de estos encuentros, y para advertir de que “esperarán a la comparecencia del president para conocer su decisión. En función de ella, “tomaremos las medidas más adecuadas en favor de la república habilitada por el referéndum”, ha avisado.
El nuevo rumbo que parecen tomar las decisiones de Puigdemont en favor de las elecciones autonómicas en Catalunya han provocado el enfado de la CUP, que ha salido en tromba a mostrar ese enojo con todas las letras. Tanto en declaraciones a los medios en los pasillos del Parlament como desde las respectivas redes sociales, los anticapitalistas se han quejado por no formar parte de las últimas reuniones que tienen lugar en Palau y por el cariz de las informaciones que se desprenden de estos encuentros, y para advertir de que “esperarán a la comparecencia del president para conocer su decisión. En función de ella, “tomaremos las medidas más adecuadas en favor de la república habilitada por el referéndum”, ha avisado.
