Los delitos sexuales son una lacra para nuestra sociedad y un tipo de agresión que crece año a año. Según el INE, en 2021 se impusieron más de 3000 condenas de este tipo, de las cuales 547 estuvieron relacionadas con violaciones o agresiones sexuales.
Este aumento del 34 % respecto a años anteriores ha elevado la conciencia social sobre este tipo de sucesos y la legislación que protege a las mujeres en estos casos. Así, son cada vez más las personas que quieren saber cómo funcional el artículo 178 del código penal y subsiguientes, y de qué modo se comprueba una agresión sexual cuando se denuncia.
RINBER ABOGADOS es uno de los despachos nacionales de referencia en estos casos. Considerados como LOS MEJORES ABOGADOS DELITO AGRESIÓN SEXUAL ESPAÑA, acumulan un historial con cientos de casos en los que han conseguido esclarecer las pruebas y lograr un veredicto justo para las víctimas y los agresores.
Estos letrados, que trabajan a nivel nacional, nos explican qué se considera delito y cuáles son los protocolos para comprobar la agresión sexual, siguiendo las pautas marcadas en el artículo 178 del Código Penal al 180, que son los tres textos legales que regulan este tipo de actos.
Qué se entiende por agresión sexual
Lo primero que hay que tener en cuenta es qué se entiende por agresión sexual. Preguntados por esta primera definición, en RIMBER ABOGADOS aclaran que es una situación de abuso a la cual se llega a través de violencia o intimidación por parte del agresor o agresora a la víctima.
Además, la norma indica que si hay acceso carnal por cualquier vía, introducción de objetos o similares, el caso pasará a considerarse violación, con penas mucho más duras, de 6 a 12 años de cárcel.
Estas son unas penas que se pueden hacer todavía más grandes con agravantes, como la participación de varias personas, cuando la víctima es más vulnerable o cuando existan lazos familiares con la víctima. Todo ello queda explicado en el artículo 180.
Protocolo de confirmación de la agresión sexual
Médicos, policías, forenses, psicólogos y abogados son profesionales que forman parte de cualquier proceso de evaluación y acompañamiento a las víctimas. Según explican en el despacho legal especializado, el principal objetivo es la protección y atención de la paciente, que debe sentirse cómoda, segura y en un ambiente de confianza durante este desagradable episodio.
El primer paso es iniciar el protocolo a través de la denuncia. En este punto, los agentes policiales solicitan la asistencia médica. El protocolo también puede activarse si la persona va al médico y este tiene sospechas de un posible abuso.
Los profesionales sanitarios son los encargados de evaluar a la víctima y levantar, con ayuda del forense, un informe pericial donde se registren todos los daños físicos revelados en el examen médico.
Se evalúan marcas, arañazos, cavidad bucal, vaginal y anal, traumatismos y todo lo que pueda demostrar que la paciente ha sido forzada.
Por supuesto, durante esa consulta se han de tratar todos los daños físicos, evaluar la presencia de ETS y proporcionar el apoyo psicológico, con el que el profesional de la salud mental también podrá evaluar el estado de la persona atacada.
La recogida de muestras
Es indispensable, ante una denuncia o sospecha de agresión sexual, que el médico y el perito forense recojan muestras biológicas que puedan pertenecer a la persona que ha cometido la agresión. Esto se podrá utilizar como prueba en sede judicial para demostrar que la víctima ha tenido un contacto real y no deseado con ese otro individuo y resultar clave para esclarecer el caso.
Con todo ello, el abogado especialista debe emplear toda su pericia y experiencia con el objetivo de sentar al culpable en el banquillo de los acusados y lograr una acusación solvente, que permita que el juez imponga una condena adecuada para paliar el sufrimiento de la víctima.
Gracias a todo este trabajo colaborativo de diferentes profesionales, especialistas en este tipo de casos, como los letrados de RIMBER ABOGADOS, pueden obtener el castigo que se merecen las personas que fuerzan a otras en el ámbito sexual en nuestro país.
