El Consejo Francés del Culto Musulmán (CFCM), un órgano de representación de los musulmanes ante los poderes públicos, ya mostró en junio su oposición a la prohibición, asegurando que «la abaya no es un símbolo religioso».
«En la tradición musulmana, que nosotros defendemos, un vestido sea el que sea no es un signo religioso en sí«, ha señalado el CFCM.
Su uso es «más ambivalente que el de un velo», según Haoues Seniguer, profesor del IEP de Lyon y especialista en islamismo.
El CFCM teme que la polémica dé lugar a una estigmatización de los musulmanes y la izquierda francesa, a su vez, argumenta que la decisión coarta las libertades civiles.
Una ley de 2004 prohíbe en las escuelas y liceos públicos los vestidos o signos con los que los alumnos «manifiestan de forma ostensible una pertenencia religiosa». El objetivo de la ley en ese momento era el velo islámico.
Principio del laicismo
La abaya cubre la totalidad del cuerpo, excepto rostro, manos y pies. Su uso por parte de adolescentes había generado polémica en Francia, debido a las críticas de la derecha y la ultraderecha.
«Ya no será posible vestirse con la abaya en la escuela”, afirmaba el domingo, el ministro de Educación francés, Gabriel Attal, en una entrevista televisiva, al considerar que «esta vestimenta incumple las estrictas normas de laicidad en la educación francesa». Seguidamente dijo que «cuando se entra en una clase, no se debe poder identificar la religión de los alumnos al mirarlos”.
El ministro de Educación enfatizó que, en Francia, «la escuela de la República se ha construido en torno a valores extremadamente fuertes, y en particular el laicismo«.
Según Attal, que tiene previsto reunirse esta semana con los directores de los centros escolares para explicar su directiva, dijo que la prohibición «tendrá carácter general, estableciendo reglas claras a nivel nacional para que los directores de centros escolares puedan decidir».
