Antonio Guerrero vuelve de nuevo a sus experimentos narrativos en su última obra, La mirada Zurda. Esta que viene a cerrar una trilogía a la que dio comienzo allá por el 2011, nos sumerge en una serie de entrevistas en las que va descubriéndose el lado disidente, y por tanto marginal, de unos personajes cuya manera de pensar incomoda, además de veras, a una sociedad cada vez más acomodada en el confortable acierto del orden. Pues cada vez existe un mayor miedo a la discrepancia, a cualquier vínculo que nos pueda producir dolor, sin querer tener en cuenta que a veces este es el precio que tenemos que pagar para construir un crecimiento personal profundo. Así, en definitiva, cada vez sentimos más pavor a abrirnos a los demás. Es esta manera de actuar, identificándonos de un modo más radical con un tipo de discurso que nos impide salir del margen, y que nos hace seguir, por tanto, los renglones del texto, el que logra que el ser humano deje de sentir la extrañeza de un mundo que lo interpela.
Después de lo dicho, nos queda, al menos, que interesarnos por esta alternativa que nos ofrece Antonio Guerrero a través de su mirada zurda, el cual vuelve a dirigir nuestra atención a esos otros que han quedado apartados a los márgenes, pues su pensamiento, según creen estos otros que hilvanan los hilos del discurso, pervierten las prédicas oficiales, y razón no les faltan.
Francisco: ¿Por qué la mirada zurda?
Antonio: La mirada zurda es una expresión que me acompaña desde el año 2011. Todo empezó con un libro que publiqué y que se llamaba La mentira zurda. Eso dio pié a una columna en Diario de Almería precisamente con ese nombre, La mirada zurda, que coincide con el nombre de mi blog. En realidad desde entonces empezó un universo zurdo en el que todavía habito. De ahí surgió una forma de entender las destrezas anatómicas y las intelectuales y otra visión de la realidad bajo la poética de lo zurdo. Siguieron mas libros: Literatura zurda. Y este último Zurdo supone la culminación de esa trilogía y de ese universo personal. En estos tres libros experimento con la narrativa. En el primero de ellos con la novela, en el segundo con el relato y en este caso con el texto periodístico. Pero Zurdo es mucho mas: es una colección de mis últimos artículos, una conversación con una persona real y un guión de corto. Todo eso es Zurdo.
Francisco: ¿Cree que el mundo anda demasiado derecho? En caso de que sí ¿Nos podría hacer una reflexión sobre eso?
Antonio: El mundo sencillamente va o lo que es lo mismo el mundo va sin rumbo. Si el menos tuviéramos la referencia de una mano diestra que rigiera nuestros presagios y miedos, la deriva del mundo en el que vivíamos tendríamos el conocimiento de una estrategia para combatirlo. En ese caso la estrategia seria zurda. Pero si vemos esto como una forma de pensamiento lo zurdo puede concebirse como lo original. Si lo original, lo honesto, lo poco corriente, es el contenido de esa palabra, entonces es algo tan poco frecuente que lo contrario: lo diestro si puede ser la referencia del mundo. En este caso hablamos de lo zurdo como lo opuesto a lo corriente o a lo vulgar. En el primer caso hablaríamos de lo zurdo contra la abominación de la alienacion.
Francisco: En la primera parte de su obra, mantiene una correspondencia con un amigo, en referencia a esta parece que discuten sobre una serie de problemas y le dan un sentido filosófico, a mí me surge una pregunta inquietante ¿La filosofía es un camino de vida? ¿Nos puede proporcionar la felicidad?
Antonio: Sin duda. Cualquier pensamiento filosófico supone un antes y un después en tanto y en cuanto ocurre una reflexión trascendental. Toda forma de ver el mundo con la disciplina filosófica indaga en lo mas profundo y eso implica que existe el riesgo de cambiar las concepciones y paradigmas de ese mismo mundo. No obstante que ese proceso, porque es un proceso interior, derive en la felicidad es otra cosa. Como tal es un concepto muy subjetivo que no puede ser objetivado, pero si sacamos del mismo el factor común y nos quedamos con aquello de un optimo estado de satisfacción donde entren elementos como la dignidad kantiana entonces la filosofía si puede conducirte ello. Ta vía iniciativa, zen, la filosofía ha hablado durante la historia de estados como la ataraxia en los que el individuo obtenía cierta plenitud. Si aceptamos el presupuesto de que la felicidad es esa base mínima o este estado de mínimos la filosofía es un vehículo que puede conducirnos sin duda porque supondría una vía reflexiva.
Francisco: Alguno de sus entrevistados son pensadores muy controvertidos para nuestra sociedad ¿Por qué entrevistarlos?
Antonio: En algunos casos fueron entrevistas buscadas, y en otros propuestas. Creo que las personas controvertidas porque, volviendo a lo anterior, nos saldríamos de lo convencional. Eso sería otro sentido de lo zurdo. Por ejemplo Dragó. Estoy seguro que a mucho esa figura le provoca aversión pero precisamente por eso, por lo distinto, hay que acercase a él. En el caso de Carlos Blanco, el niño superdotado del Crónicas Marcianas, era una parada obligatoria. Por su alto coeficiente intelectual, creo que el mayor de España, era la persona adecuada para preguntarle si creía o no en Dios. Creo que debemos aprender de estos personajes. Recuerdo ahora a Sócrates y por qué le llamaban el tábano. Estoy seguro que en su momento histórico no gozaba de la reputación que goza ahora. Pero era notable su acción filosófica. Imaginemos su historia: se trataba de un albañil, que era culto, y que hablaba todo el rato de la moral. Y no solo eso, se trataba de una persona que provocaba el pensamiento. Si ocurriera hoy día podría ser mas rechazado aún de lo que fue en su época, pero eso no hace prescindible su filosofía. Creo que en lo controvertido esta lo zurdo y lo zurdo es una referencia de calidad.
Francisco: ¿Qué pensador o libro te ha influido en tu trabajo como autor y por qué?
Antonio: Han sido muchos. Yo en realidad no tengo un libro preferido. Me pasa como a Garci, el director de cine cuando le preguntaron sobre cuál era su equipo de futbol. Este respondió que por qué tenía que tener uno preferido si a él lo que le gustaba era el fútbol. Pues algo parecido pienso, creo. Han sido muchos los libros los que me han influido y no solo en este libro sino en mi vida.
Francisco: Ya por último, ¿Una frase que le represente?
Antonio: En el libro, justo al final, hay un anexo de respuestas a la pregunta que le hice a personas como Rosa Monterio, Jorge Carrión, Eloy Tizón, Dragó, Savater, etc. La pregunta era: Cómo definiría “la mirada zurda”. Las repuestas son impresionantes. En mi caso si tuviera que elegir una frase que me representara o que representara a mi libro podría ser esta: un zurdo es aquella persona que, con independencia de que su forma de ver el mundo sea correcta o incorrecta, tiene una forma de verlo original. El dia de la presentación Fernando Labordeta dijo que yo tenía una isla o que había creado una isla donde ser independiente. Algo así podría ser la definición de zurdo en última instancia.
